Juan Francisco de Castro Fernández 1721-1790
Jurisconsulto, presbítero y apologista católico español, nacido en Lugo el 25 de febrero de 1721, autor de obras notables en su tiempo, en las que discute la naturaleza de las leyes y procura mostrar la existencia de Dios. Estudió teología y jurisprudencia en Santiago de Compostela y Avila, donde obtuvo el grado de doctor. Recibidas las órdenes sacerdotales, en 1749 era ya regente de la parroquia de San Pedro de Losón (Pontevedra).
Publicó en 1765, en dos tomos, unos Discursos críticos sobre las leyes y sus intérpretes, en que se demuestra la incertidumbre de éstos, y la necesidad de un nuevo y metódico cuerpo de derecho, para la recta administración de justicia, que continuó en 1770 con un tercer tomo: Discursos críticos sobre las leyes y sus intérpretes: incertidumbres y detrimentos de los mayorazgos y otras disposiciones análogas en el bien común: su ofensa a la población, agricultura, artes y comercio: necesidad de remedio, tentativa de algunos medios. Esta obra mereció ser reeditada en 1829, en dos tomos.
Carlos III le nombró canónigo de Lugo, cargo del que tomó posesión el 29 de diciembre de 1767. Nueve años después fue nombrado arcediano de Dozón (Pontevedra), provisor y vicario general. Al parecer rechazó el nombramiento de obispo de León, para el que habría sido propuesto por el monarca.
En 1780 comenzó la publicación de su obra más ambiciosa: Dios y la Naturaleza. Compendio histórico, natural, y político del Universo, en que se demuestra la existencia de Dios, y se refiere la Historia natural y civil, la Religión, leyes, y costumbres de las naciones antiguas, y modernas más conocidas del Orbe, de la que llegó a publicar, hasta 1789, diez volúmenes, y que dejó muy incompleta respecto de su plan inicial.
Desde 1784 hasta su fallecimiento, ocurrido en Lugo el 24 de diciembre de 1790, fue el primer presidente de la Sociedad Económica de Amigos del País, de Lugo. También fue Abogado de la Real Audiencia del Reino de Galicia.
«Castro (D. Juan Francisco de). Abogado de la Real Audiencia del Reino de Galicia. Discursos críticos sobre las Leyes y sus Intérpretes, en que se demuestra la incertidumbre de éstos, y la necesidad de un nuevo y metódico cuerpo de derecho, para la recta administración de justicia. Madrid 1765, dos tomos en 4º. El tomo 1º contiene dos libros, y en el primero cuatro discursos, que tratan del origen del derecho en común, y después de los del derecho Romano, Canónico, y Español. El libro segundo comprehende varias consideraciones generales sobre el derecho, su autoridad, interpretaciones, y su estudio.
El tomo 2º contiene otros dos libros, y el primero de ellos seis discursos, sobre la interpretación de las leyes; sobre el origen y confusión de las opiniones; sobre la incertidumbre de éstas, y dificultades insuperables en elegir entre ellas seguro partido. En el libro cuarto se ponen varios ejemplos en comprobación de lo que se ha dicho en los antecedentes, acerca de la incertidumbre en la interpretación, y en las opiniones.
El Autor piensa bien, y tiene el mérito de que muchas de sus reflexiones, y particularmente los ejemplos, los debe a su observación y estudio, y el de probar, con bastante solidez, lo que se propone desde el principio de su obra; esto es, la necesidad de un nuevo, y metódico cuerpo de derecho, para la recta administración de la justicia.
En el año de 1770 continuó el Sr. Castro su obra con otro tomo intitulado: Discursos críticos sobre las Leyes, y sus Intérpretes: incertidumbres y detrimentos de los Mayorazgos, y otras disposiciones análogas en el bien común: su ofensa a la población, agricultura, artes, y comercio: necesidad de remedio: tentativa de algunos medios. En ellos se trata del origen y progresos de los Mayorazgos: de los fideicomisos que les precedieron; época de su establecimiento en España: de los daños que causan a la población, a la agricultura, artes, y comercio; y de las ventajas de la igualdad en el repartimiento de tierras.
Dios y la Naturaleza, Compendio histórico, natural, y político del Universo, en que se demuestra la existencia de Dios, y se refiere la Historia natural y civil, la Religión, leyes, y costumbres de las naciones antiguas, y modernas más conocidas del Orbe. Madrid, por D. Joachín Ibarra 1780, y 1781, 7 tomos en 4º.
El Sr. Castro se propuso en esta obra, nada menos, que dar la historia de los dos mundos Físico y Moral. En el prólogo expone la idea de su gran proyecto. Explica la teoría del hombre, si no con la delicadez con que la han dado algunos Filósofos de estos últimos tiempos, ciertamente con más verdad, conforme a los principios de nuestra sagrada Religión. Sienta los principios del orden que Dios estableció en la formación del Universo. Advierte la diferencia que hay entre las leyes de la materia, y las del espíritu. Habla luego del hombre, en quien se unen las dos sustancias, y de los efectos tan diversos que deben resultar de semejante unión, comprobados por la historia general de todas las naciones. Lo considera primero en el estado de la inocencia, y luego en el de la corrupción por el pecado, y los efectos que deben resultar en este último de la lucha continua entre la carne, y el espíritu. Finalmente declara el pensamiento de su obra, que es, según él mismo dice, delinear por menor las leyes de entrambos mundos, proponiendo a los curiosos que quisieren considerarle un espectáculo Físico y Moral del Universo, entrelazando uno y otro, según la oportunidad de las materias.
Hasta ahora esta obra está muy a los principios, pues falta, no solamente toda la parte Física, sino también la Moral de las naciones modernas, y de muchas de las antiguas.» (Juan Sempere Guarinos, Ensayo de una biblioteca española de los mejores escritores del reinado de Carlos III, Imprenta Real, Madrid 1785, tomo segundo, páginas 158-160.)
«Y en verdad que no sería excusado, antes muy útil y fructuoso, el análisis y juicio de libros tan notables como la Philosophia Sceptica del doctor Martínez, la Lógica, la Filosofía Moral y los Opúsculos de Piquer, La Falsa Filosofía del Padre Ceballos, los Desengaños filosóficos de Valcárcel, El Philoteo del cisterciense D. Antonio Rodríguez, los Discursos filosóficos sobre el hombre de Forner, los Principios esenciales del orden de la Naturaleza de Pérez y López, Dios y la Naturaleza de D. Juan Francisco de Castro, las Investigaciones de Arteaga sobre la belleza, y El Hombre Físico de Hervás, escépticos reformados, o sea eclécticos los unos, adversarios los otros del enciclopedismo, un tanto sensualista alguno de ellos, y secuaces los demás del espiritualismo cartesiano.» (Marcelino Menéndez Pelayo, La ciencia española. I. Indicaciones sobre la actividad intelectual de España en los últimos tres siglos, 3ª edición, Colección de Escritores Castellanos, tomo I, Madrid 1887, página 18.)
«No he recibido el folleto acerca de D. Juan Francisco de Castro.» (Carta de 27 de noviembre de 1881 de Marcelino Menéndez Pelayo a Gumersindo Laverde, MPEP 5:215.)
«Casi tan vasta en el plan como la Idea del universo [de Hervás y Panduro] aunque muy inferior en tesoros de erudición y doctrina, es la obra que con el título de Dios y la Naturaleza, compendio histórico, natural y político del Universo ({1} Dios y la Naturaleza, Compendio histórico, natural y político del Universo, en que se demuestra la existencia de Dios, y se refiere la historia natural y civil, la Religión, leyes y costumbres de las naciones antiguas y modernas más conocidas del orbe. Madrid, por D. Joachín Ibarra, 1780, 1781 y siguientes. 10 tomos 4.º) publicó, en 1780 y en los años siguientes, el Canónigo gallego D. Juan Francisco de Castro, de honroso recuerdo entre nuestros jurisconsultos por sus Discursos críticos sobre las leyes y sus intérpretes (libro que influyó mucho en la difusión del estudio del derecho nacional y en la reforma de los métodos), y de buena memoria en su país natal de Lugo, como promovedor de la industria popular y de las mejoras económicas. Sin combatir directamente las teorías heterodoxas como el P. Ceballos, se propuso, a manera de antídoto, desarrollar con toda amplitud el argumento de las causas finales por el espectáculo físico y moral del universo. Explica los principios del orden en el mundo intelectual, la teoría del hombre, la oposición y unión de la materia y del espíritu, las consecuencias del pecado original, y de aquí procede a la descripción de entrambos mundos, el físico y el moral, entrelazando y comparando sus leyes. Diez tomos llegaron a imprimirse: uno más se conserva manuscrito en Galicia; pero la obra llevaba camino de crecer in inmensum, puesto que abarcaba, además de la filosofía, todos los pormenores de la Historia natural y civil, y la exposición de la religión, leyes, costumbres y ceremonias de todas las razas, desde las más cultas hasta las más bárbaras. Bien puede exclamarse aquí con el poeta: «Yo amo al que desea lo imposible.» Para alcanzar la perfecta demostración del principio del orden en el mundo, no era preciso descender a tales menudencias, y en esto como en todo, mostró talento filosófico muy superior al de Castro el sevillano don Antonio Xavier Pérez y López...» (Marcelino Menéndez Pelayo, Historia de los heterodoxos españoles, libro VI, capítulo III: «El enciclopedismo en España durante el siglo XVIII», Librería Católica de San José, Madrid 1881, tomo 3, págs. 327-328.)
«Francisco de Castro. Biografía. Jurisconsulto español. Nació en Galicia hacia 1730. Dio a la imprenta las siguientes obras: Discurso crítico sobre las leyes y sus intérpretes (Madrid, 1765) al que siguió otro Discurso sobre el mismo asunto y sobre los inconvenientes de los mayorazgos (1770); Dios y la Naturaleza, compendio histórico natural y político del universo (1780, 7 vol.).» (Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano de Literatura, Ciencias y Artes, Montaner y Simón, Barcelona 1888, tomo 4, página 944.)
«Francisco de Castro. Biografía, Jurisconsulto español, nacido en Galicia hacia el año 1730. Fue abogado de la Audiencia de Santiago y escribió: Discurso crítico sobre las leyes y sus intérpretes (Madrid, 1765), Discurso sobre el mismo asunto y sobre los inconvenientes de los mayorazgos (1770), y Dios y la Naturaleza (1780).» (Enciclopedia universal ilustrada europeo-americana, Hijos de J. Espasa, Barcelona 1911, tomo 12, página 384.)
«Escaso de talento filosófico, el canónigo D. Juan Francisco de Castro emprendió la impresión de un libro enciclopédico titulado Dios y la Naturaleza, compendio histórico, natural y político del Universo (1780 y sig.), del cual «compendio» sacó a la luz diez volúmenes y llevaba trazas de nunca acabar, pues aun dejó buena parte manuscrita. Abarcó mucho, ciñó poco y no ofreció novedad alguna en la justificación de las causas finales inferidas del espectáculo de la creación.» (Mario Méndez Bejarano, Historia de la filosofía en España hasta el siglo XX, Renacimiento, Madrid 1927, página 381.)
Bibliografía de Juan Francisco de Castro Fernández
- Discursos críticos sobre las Leyes, y sus Intérpretes, en que se demuestra la incertidumbre de estos y la necesidad de un nuevo y metódico cuerpo de derecho para la recta administración de justicia, tomo primero: Joachim Ibarra, Madrid 1765, 326 págs.; tomo segundo: Joachim Ibarra, Madrid 1765, 347 págs.; Discursos críticos sobre las Leyes, y sus Intérpretes: incertidumbres y detrimentos de los Mayorazgos, y otras disposiciones análogas en el bien común. Paradoxas sobre la Nobleza y mérito para fundar Mayorazgos, tomo tercero: Joachim Ibarra, Madrid 1770, 374 págs.
- Discursos críticos sobre las leyes y sus intérpretes, segunda edición, ilustrada con las citas a la Novísima Recopilación, Imprenta de E. Aguado, Madrid 1829, 2 vols.
- Dios y la Naturaleza. Compendio histórico, natural y político del Universo, en que se demuestra la existencia de Dios, y se refiere la Historia natural y civil, la Religión, leyes, y costumbres de las naciones antiguas, y modernas más conocidas del Orbe, tomo 1: Joachin Ibarra, Madrid 1780, XLII+344 págs.; tomo 2: Joachin Ibarra, Madrid 1780, 400 págs.; tomo 3: Joachin Ibarra, Madrid 1780, 390 págs.; tomo 4: Joachin Ibarra, Madrid 1781, 524 págs.; tomo 5: Joachin Ibarra, Madrid 1781, 423 págs.; tomo 6: Joachin Ibarra, Madrid 1781, 412 págs.; tomo 7: Joachin Ibarra, Madrid 1781, 311 págs.; tomo 8: Viuda de Ibarra, Hijos y Compañía, Madrid 1788, XII+561 págs.; tomo 9 (...supersticioso culto, templos, sacerdocio, sacrificios, oráculos y profetas en el gentilismo): Viuda de Ibarra, Madrid 1790, 597 págs.; tomo 10: Viuda de Ibarra, Madrid 1791, 610 págs.
Sobre Juan Francisco de Castro Fernández
- Juan Sempere Guarinos, Ensayo de una biblioteca española de los mejores escritores del reinado de Carlos III, Imprenta Real, Madrid 1785, tomo segundo, páginas 158-160.
- Antonio Neira de Mosquera, «Juan Francisco de Castro», Semanario Pintoresco Español, 27 junio 1852.
- Manuel Castro López, «El Doctor Castro», Galicia, La Coruña, nº 10, octubre 1887, págs. 173-174.
- Gumersindo Laverde, «El Doctor D. Juan Francisco de Castro», La Ilustración Gallega y Asturiana, nº 24, 28 de agosto de 1881.
- Homenaje rendido a la memoria del Doctor D. Juan Francisco Castro, hijo ilustre de esta ciudad de Lugo, en cuyo honor se hicieron las públicas manifestaciones y se pronunciaron los discursos y leyeron las poesías que en este álbum se contienen, Tipografía de Antonio Villamarín, Lugo 1881.
- Arturo Veiga Valiña, «El doctor Don Juan Francisco de Castro», Boletín de la Comisión Provincial de Monumentos Históricos y Artísticos de Lugo, tomo 2, nº 14-15, 1945, págs. 66-74.
- Ernesto Baltar Santaló, Exégesis de la obra del jurisconsulto gallego D. Juan Francisco de Castro, discurso leído el día 29 de octubre de 1971 en la solemne sesión de ingreso en la Academia Gallega de Jurisprudencia y Legislación del académico Ernesto Baltar Santaló (contestación de Manuel Ojea Otero), La Coruña 1972.
- Fausto Dopico Gutiérrez del Arroyo, «Juan Francisco Castro, un ilustrado galego entre a reforma e a superación da sociedades feudal», Grial, tomo 14, nº 53, julio-septiembre 1976, págs. 356-360.
- Víctor Tau Anzoátegui, «El pensamiento español en el proceso de la codificación hispanoamericana: Los Discursos críticos de Juan Francisco de Castro», en Revista de Estudios Histórico-Jurídicos, Universidad Católica de Valparaíso, nº 5, 1980, pág. 375-ss; y en Index, Napoles, nº 14, 1986, pág. 69-ss.
- Gonzalo Díaz Díaz, HDFE 2:264-265 (1983)