Filosofía en español 
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Estado socialista

Estado socialista

El Estado socialista es un Estado de nuevo tipo, creado por la clase obrera en la U.R.S.S., en lugar de la máquina estatal burguesa, destruida y hecha añicos. El Estado socialista constituye “un Estado democrático de una manera nueva (democrático para los proletarios y los desposeídos en general) y dictatorial de una manera nueva (contra la burguesía)” (Lenin). Por su esencia, el Estado socialista es la dictadura del proletariado. La significación y el papel del Estado socialista de los obreros y campesinos radica en que es el arma principal en manos de los obreros y campesinos para la victoria del socialismo y para la defensa de las conquistas socialistas de los trabajadores contra el cerco capitalista. Desde la época de la Revolución de Octubre de 1917, el Estado socialista de la U.R.S.S. ha atravesado en su desarrollo dos fases principales. Primera fase: el período que corre desde la Revolución de Octubre hasta el momento de la liquidación de las clases explotadoras. La tarea principal del Estado Socialista de este período consistió en aplastar la resistencia de las clases explotadoras derrocadas, organizar la defensa del país contra los ataques de los intervencionistas, restaurar la industria y la agricultura, preparar las condiciones para liquidar los elementos capitalistas. Congruentemente con esas tareas, el Estado socialista realizó, en aquel período, dos funciones fundamentales. La primera, aplastar la resistencia de las clases explotadoras derrocadas. La segunda, defender al país de los ataques del exterior. Junto con estas funciones, fundamentales para ese período, el Estado socialista realizó una tercera función: la de los organismos estatales en el trabajo de organización económica y de educación cultural, pero esta función no alcanzó, en aquel período, gran desarrollo. Segunda fase: el período que va desde la liquidación de los elementos capitalistas de la ciudad y del campo hasta el triunfo completo del sistema socialista de la economía y la adopción de la nueva Constitución. El objetivo fundamental del Estado socialista de este período era: organizar la economía socialista en todo el país y liquidar los elementos capitalistas, organizar la revolución cultural, organizar un ejército completamente moderno para la defensa del país. De conformidad con esto, han cambiado también las funciones del Estado socialista. “Ha desaparecido, se ha extinguido la función de aplastamiento militar dentro del país, porque la explotación ha sido suprimida, ya no existen explotadores y no hay a quién aplastar. En lugar de la función de represión, surgió para el Estado la función de salvaguardar la propiedad socialista contra los ladrones y dilapidadores de los bienes del pueblo. Se ha mantenido plenamente la función de la defensa militar del país contra ataques del exterior... Asimismo se ha conservado, obteniendo un desarrollo completo, la función de los organismos del Estado en el trabajo de organización económica y de educación cultural. Ahora, la tarea fundamental de nuestro Estado dentro del país, consiste en desplegar el trabajo pacífico de organización económica y de educación cultural. En lo que se refiere a nuestro Ejército, a los organismos de sanción y de contraespionaje, éstos van dirigidos, no ya contra el interior del país, sino contra el exterior, contra los enemigos exteriores” (Stalin). Pero el Estado socialista de la U.R.S.S. vive en medio de un cerco capitalista. Bajo estas condiciones adquieren especial importancia el mecanismo del Estado socialista y los importantes eslabones de dicho mecanismo, tales como el Ejército Rojo, la Marina Roja de Guerra, los organismos del contraespionaje soviético, necesarios a los trabajadores de la U.R.S.S. para defender sus conquistas socialistas contra el cerco capitalista. “Seguimos avanzando, hacia el comunismo. ¿Se mantendrá en nuestro país el Estado, también durante el período del comunismo? Sí, se mantendrá, si no se liquida el cerco capitalista, si no se suprime el peligro de un ataque armado del exterior... No, no se mantendrá y se extinguirá, si el cerco capitalista se liquida, si lo sustituye un cerco socialista” (Stalin).

Diccionario filosófico marxista · 1946:102-103

Estado socialista

Tipo de Estado nuevo, creado por primera vez por la clase obrera de la U.R.S.S. en reemplazo de la máquina de Estado burguesa aplastada por la revolución proletaria.

El Estado socialista es un “...estado democrático de una manera nueva (para los proletarios y los desposeídos en general) y dictatorial de una manera nueva (contra la burguesía)” (Lenin, “El Estado y la revolución”, en Obras escogidas, t. II, p. 199, Ed. esp., Moscú, 1948). Por su naturaleza, el Estado socialista es la dictadura del proletariado (ver). El Estado socialista constituye el arma principal de los obreros y los campesinos en su lucha por la victoria del socialismo y la defensa de las conquistas socialistas contra la agresión. El Partido Comunista, que orienta todo el desarrollo de la sociedad socialista, es la fuerza dirigente del Estado socialista. El trabajo cotidiano del Estado socialista se efectúa con la ayuda de las “correas de trasmisión”, las “palancas” que ligan el partido a las masas trabajadoras: sindicatos, soviets, cooperativas, Unión de Juventudes.

Desde la Revolución de Octubre, el Estado socialista ha atravesado por dos fases principales en su desarrollo. La primera fase va de la Revolución de Octubre a la liquidación de las clases explotadoras. En esta fase, la tarea principal del Estado socialista consistía en aplastar la resistencia de las clases derribadas, en organizar la defensa del país contra la agresión, en reconstruir la industria y la agricultura y en preparar la supresión de los elementos capitalistas. El Estado cumplía en el curso de este período, dos funciones principales: en lo interior, represión de la resistencia de las clases explotadoras derribadas, y en lo exterior, defensa contra la agresión del extranjero. Cumplía además una tercera función: organización económica y trabajo cultural y educativo, pero esta función no adquirió entonces un desarrollo serio. La segunda fase comprende el período que va de la liquidación de los elementos capitalistas de la ciudad y del campo, a la victoria completa del sistema socialista de la economía, a la adopción de la nueva Constitución y el período de la edificación del comunismo. La tarea principal del Estado en el curso de esta fase, consiste en organizar la economía socialista en el conjunto del país, y en hacer desaparecer los últimos vestigios de los elementos capitalistas, en realizar la revolución cultural y en organizar un ejército perfectamente modernizado para la defensa del país. De acuerdo con estas nuevas tareas, se modificaron igualmente las funciones del Estado Socialista Soviético.

La función de la represión militar en el interior del país desapareció puesto que la explotación fue suprimida y no existen más explotadores. La función de represión cedió el lugar a la de protección de la sociedad socialista contra los ladrones y los dilapidadores de bienes públicos. La función de defensa militar del país se ha conservado íntegramente. La función de organización económica y de trabajo cultural se ha desarrollado plenamente. La tarea esencial del Estado Soviético durante la segunda fase, en lo interior, es el trabajo pacífico de organización económica, de cultura y de educación. En lo que concierne al Ejército Soviético, los organismos punitivos y los servicios de información, su punta está dirigida no hacia el interior del país sino hacia el exterior, y tienen por finalidad, defender al país contra los enemigos de afuera.

En el curso de la gran guerra nacional, la tarea principal del Estado Socialista Soviético fue la de organizar la defensa y aplastar al enemigo. En la guerra, como en la edificación pacífica, el régimen soviético demostró su vitalidad, sus ventajas sobre el régimen burgués El Estado Soviético supo poner rápidamente en pie de guerra a la economía nacional, movilizar todas las reservas y posibilidades para llegar a la gran victoria. Después de la guerra, desarrolló un trabajo de organización sin precedente por su amplitud, con el objeto de producir un nuevo florecimiento de la economía nacional y de la cultura del pueblo, para dar cima a la construcción del socialismo y pasar gradualmente del socialismo al comunismo. En breve espacio de tiempo, el Estado Socialista Soviético ha revelado plenamente su papel inmenso en la edificación del socialismo y del comunismo, en diferencia esencial con relación al Estado burgués. Este reprime a la mayoría trabajadora de la sociedad en beneficio de la minoría explotadora. No se ocupa casi nada o nada de la organización económica, del trabajo cultural y educativo. No hace más que defender el derecho de los capitalistas a explotar a los obreros. No dirige los procesos económicos y éstos se efectúan espontáneamente, semejantes en eso, a las fuerzas ciegas de la naturaleza. El Estado burgués, que no tiene interés en dar instrucción a las masas, en iniciarlas en la cultura, las aísla de todos los valores espirituales creados por la humanidad, les inocula el veneno de la cultura burguesa en putrefacción. El Estado Soviético es un estado de tipo nuevo. Sus funciones se han ampliado extraordinariamente. Por primera vez en la historia de la sociedad, el Estado se ocupa de la organización económica, de la cultura, de la educación. La economía socialista no se desarrolla espontáneamente sino de acuerdo con un plan, y es organizada por el Estado y el Partido de acuerdo con las exigencias de las leyes objetivas de la economía. El Estado socialista está interesado esencialmente en elevar el nivel de conciencia y de cultura de las grandes masas trabajadoras. Es también un Estado de tipo nuevo por su democratismo. El propio pueblo participa en la dirección del Estado, que no puede existir sin el sostén de millones de hombres en todas sus iniciativas. Allí reside el “secreto” de los éxitos obtenidos por el Estado socialista.

La política exterior del Estado socialista, de igual modo que su política interior, está enteramente al servicio de las masas populares. En su condición de estado de los trabajadores, está interesado esencialmente en que reine la paz entre todos los pueblos. He aquí por qué practica una política de paz consecuente. El Estado Socialista Soviético, de igual modo que los estados de democracia popular, constituye el baluarte de la paz en el mundo entero.

Diccionario filosófico abreviado · 1959:170-172

Estado socialista

Estado de la sociedad socialista, parte política de la superestructura sobre la base económica del socialismo. El Estado socialista es un nuevo tipo de Estado que adviene en sustitución del Estado burgués y como resultado de la revolución socialista. El proceso de formación de la superestructura socialista ocurre en el transcurso de todo el período de transición del capitalismo al socialismo. El Estado del período de transición es la dictadura del proletariado. Es socialista por sus fines y objetivos, pues sirve de medio para la construcción del socialismo. A medida que la sociedad socialista se desarrolla, cambian las funciones del Estado socialista; liquidadas las clases explotadoras, desaparece la función de aplastar su resistencia y se desarrollan en todos los aspectos las funciones principales del Estado socialista: las concernientes a la organización económica y a la educación y cultura. Al constituirse el sistema socialista mundial, el Estado socialista, junto a las funciones de luchar por la paz y defender el país, asume una nueva función exterior, la de desarrollar la colaboración fraternal con los países socialistas. Con la victoria completa y definitiva del socialismo, al entrar la sociedad en el período de la construcción del comunismo, en todo el frente, el Estado de la dictadura del proletariado, se transforma en Estado de todo el pueblo, órgano de expresión de la voluntad del pueblo entero. El Estado socialista es un instrumento para consolidar el socialismo y transformar gradualmente la sociedad socialista en comunista. La extinción del Estado significa que todas las instituciones del Estado socialista y toda la organización política de la sociedad socialista se van convirtiendo gradualmente en autogestión social comunista. Para que el Estado se extinga por completo, es necesario establecer una sociedad comunista desarrollada en el interior del país y llegar, también, a la victoria y a la consolidación del socialismo en el plano internacional.

Diccionario filosófico · 1965:153-154

Estado socialista

Parte política de la superestructura que se eleva sobre la base económica del socialismo, Estado de nuevo tipo, que sustituye al Estado burgués, como resultado de la revolución socialista. El proceso de creación de la superestructura socialista se desarrolla en el curso de todo el período de transición del capitalismo al socialismo. El Estado de este período reviste la forma de dictadura del proletariado. Es socialista por sus fines y tareas. A medida que se desarrolla la sociedad socialista se modifican las funciones del Estado socialista; en virtud de la supresión de las clases explotadoras se extingue la función de su represión y se desarrollan integralmente las funciones principales del Estado socialista: la económico-organizativa y la cultural-educativa. Al formarse el sistema socialista mundial, además de las funciones de la lucha por la paz y fortalecimiento de la capacidad defensiva del país, surge una nueva función exterior del Estado socialista: el desarrollo de la cooperación fraternal con otros países socialistas. Al ser construido el socialismo desarrollado y al entrar la sociedad en el período de edificación práctica del comunismo, el Estado de dictadura del proletariado se convierte en Estado de todo el pueblo: organismo que expresa la voluntad de toda la nación. Los trabajadores participan en la administración del Estado a través de los órganos de poder del pueblo (en la URSS, los Soviets de Diputados Populares), así como de órganos de control popular. La extinción del Estado en el proceso de edificación de la sociedad comunista significa la transformación gradual del Estado socialista y de toda la organización política de la sociedad socialista en autogestión social comunista. Para la extinción total del Estado es necesario que sea construida la sociedad comunista desarrollada dentro del país y que el socialismo triunfe y se afiance en todo el mundo.

Diccionario de filosofía · 1984:147-148