Filosofía en español 
Filosofía en español


Juan de Contreras

Remembranzas

Son las nuevas edades más suaves y mejores
que aquellas de los santos y los conquistadores.
Hoy la vida es más dulce, se ama más a la vida.
La humanidad, más libre, más diestra y atrevida,
mar, tierra y aire hiende con el himno triunfal
de sus máquinas, monstruos del fuego y del metal.
Ya no hay siervos de gleba ni señores feudales,
las leyes son más justas, los hombres más iguales,
más firme y más compacta la sociedad está.
¿Por qué añoramos aquello que se va?
¿Por qué se nos oprime de angustia el corazón
cuando una iglesia en ruinas, un viejo torreón
recuerdo de esas épocas que desaparecieron
pasan al vago reino de las cosas que fueron?
Es que lo antiguo tiene un misterioso encanto.
El tiempo lo hace todo más bello, noble y santo.
Las miradas del sabio, gustan de contemplar
más el añoso roble que el tierno pimpollar;
más que la nueva fábrica soberbia, el escondido
claustro de algún convento, lleno de paz y olvido:
más que el cuadro moderno, vigoroso y genial,
la tabla minuciosa de un monje medioeval
en la que una Madona, dulce, casta, sencilla,
sonríe a los tres reyes que doblan la rodilla.
Por eso yo quisiera que os hablara mi canto
de eso que tanto admiro, de eso que yo amo tanto.
La antigua raza, ungida con la serenidad
de los que no temblaron ante la eternidad
y en las grandes batallas o en la quietud austera
de una celda de asceta y ante una calavera
miraban a la muerte despacio y cara a cara
cual vencido enemigo que ya no amenazara.
Cosas y hombres de antaño: cantan mis versos eso
que huye ante la avalancha triunfante del progreso.
Un mundo que se esfuma, que se pierde y se aleja.
¡Oh nuestra grande España, tradicional y vieja!

Juan de Contreras