El profesor S. Hossein Nasr, director de la Academia Imperial de Filosofía del Irán, en Madrid
Atribuye a España un importante papel
como nexo entre las civilizaciones cristiana y musulmana
Madrid.- (De nuestra Redacción.) «La filosofía en el mundo islámico» es el tema de la conferencia que pronunciará esta tarde el doctor Seyyed Hossein Nasr, director de la Academia Imperial de Filosofía del Irán y embajador extraordinario de S. M. Imperial el Sha. El profesor Nasr, uno de los más brillantes pensadores del área cultural musulmana, ha llegado a Madrid por invitación de la Reina Doña Sofía y del Departamento Interdisciplinar de Humanidades Contemporáneas (Universidad Autónoma), que dirige don José de Solas, del que, como es sabido, es alumna la Soberana española.
Esta conferencia del doctor Nasr se inscribe –recordó el profesor De Solas, al presentar al ilustre intelectual en presencia del embajador del Irán– en los seminarios doctrinales que viene desarrollando el citado Departamento de la U. A. M. Tales seminarios persiguen –a base de conferencias, viajes y otros medios– la finalidad de dar a conocer las diversas doctrinas religiosas que en la actualidad sirven para adoptar posiciones frente a los problemas del mundo. En consecuencia se ha esperado al profesor Nasr para que explique, desde la vertiente islámica, un aspecto de la civilización a la que pertenece.
Seyyed H. Nasr nació en 1933. Se graduó en Física, Filosofía y Ciencias en las más prestigiosas Universidades norteamericanas, y durante tres años fue catedrático de la de Harvard. También cursó esas especialidades en Europa. En 1958 regresó a su país, donde ha desempeñado los más altos cargos universitarios: decano de la Facultad de Literatura y Humanidades, de Teherán; diputado-canciller de la misma Universidad, y canciller de la Universidad Tecnológica de Aryamehr. Ha dictado conferencias en numerosos países. Sus obras más renombradas –traducidas ya a diez idiomas– son «Tres sabios musulmanes», «Ideales y realidades del Islam», «Introducción a las doctrinas cosmológicas islámicas», «Hombre y naturaleza: la crisis espiritual del hombre moderno» y «Ciencia islámica».
España, entre dos culturas
No es ésta la primera vez que visita España el doctor Nasr. Con anterioridad vino a conocer los hitos de la cultura musulmana (monumentos de Granada, Córdoba y Sevilla). Confiesa que siempre le han interesado las influencias persas en el flamenco, a través especialmente de los músicos de las dinastías Omeya y Sasánida. Asimismo, participó en el Congreso Internacional de Filosofía Medieval.
Para él, el papel de España como puente entre la civilización islámica y la europea es importante, y opina que en el futuro lo será aún más. El pensamiento islámico es, por una parte, inseparable de la conciencia histórica española y, por otra, vivero muy destacado de pensadores durante la dominación árabe. El profesor Nasr mencionó particularmente al murciano Ibn Arabi, cuya obra se estudia todavía en todas las Universidades musulmanas.
–En medio de la crisis espiritual e intelectual por la que atraviesa Occidente, despierta un enorme interés el estudio de las filosofías orientales, y el pensamiento islámico está llamado a desempeñar un importante papel, como filosofía hermana de la tradición espiritual cristiana, como nexo entre los sistemas de pensamiento occidentales y las demás filosofías de Oriente. España, pues, tiene mucho que decir en ese campo.
Iniciativa imperial
El director de la Academia Imperial de Filosofía del Irán habla del profundo desconocimiento, en Occidente, de la filosofía islámica, en los últimos siete siglos. Al interrumpirse la presencia árabe en España –que tan acusadamente había influido en la cultura europea– la fosa de la ignorancia se ha ahondado de manera progresiva. De ahí el deseo de «resucitar» los valores de la tradición filosófica del Islam. Esta es la línea que sigue la Academia que él dirige, auspiciada por la Emperatriz Farah y que es el primer centro en su género creado en la órbita cultural musulmana. Dos son los objetivos de la Academia: rescatar la tradición pensante (que incluye también las filosofías premahometanas, como el mazdeísmo, maniqueísmo, &c.), y facilitar una confrontación de las escuelas propias y las de otra procedencia distinta, especialmente en cuanto a su influencia en la civilización musulmana contemporánea.