Filosofía en español 
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Comentarios críticos al Diccionario soviético de filosofía

Ciencia

Ciencia en el Diccionario soviético de filosofía


 

Ciencia · David Alvargonzález · 10 de noviembre de 2017

    En esta entrada el problema central que merece la pena comentar es la idea de ciencia que tiene el Diamat y el Hismat. Esta idea internamente es contradictoria y confusa y voy a intentar explicar en qué consiste esa contradicción interna y esa confusión. Fundamentalmente se afirma que las ciencias son partes de la superestructura, lo mismo que las ideas jurídicas y políticas, y entonces se modifican en función de los cambios de la base. Se dice que las ciencias son “formas de la conciencia social” que están determinadas, en última instancia, por las relaciones económicas de la sociedad. Esto sería cierto dicho en general porque luego parece que en la Unión Soviética esto cambiaría porque “la ciencia [se dice] sirve realmente al pueblo”, “la Gran Revolución de octubre inaugura una nueva época de la Humanidad” y “la ciencia emancipada del poder del capital se pone al servicio de los trabajadores” de modo que “la antigua dispersión de métodos artesanales […] ha sido sustituida [en la URSS] por una planificación de las fuerzas y los recursos de las ciencias para resolver los problemas de los trabajadores”. Entonces, la ciencia, en la URSS, la “ciencia socialista”, “se caracteriza por su realización consecuente del principio de la unidad entre la teoría y la práctica”, porque la ciencia anterior a la ciencia soviética se supone que era una ciencia teórica, especulativa, en la que esta unidad entre la teoría y la práctica y la clase trabajadora no se daría. Esta interpretación histórica ya empieza a ponernos sobre la pista de los problemas que plantea la idea de ciencia en el materialismo histórico y dialéctico tal como aparece en las diferentes versiones (porque en esto no hay cambios importantes) del Diccionario. La ciencia es una superestructura y es una forma de conciencia social, en general; quizás en la URSS esto deje de ser así, porque se da esta unidad entre la teoría y la práctica, pero tampoco queda esto muy claro, porque en última instancia el régimen comunista también tiene su base y su superestructura.

    Este asunto tiene que ver, a su vez, con el partidismo de la ciencia y de la filosofía, que es otra de las entradas del Diccionario, porque la ciencia no es neutral, la ciencia es partidista y esto es una característica muy importante de las ciencias. Como digo, estas ideas parecen ser irrenunciables para el materialismo histórico y dialéctico, y entran en contradicción con la afirmación, que también se hace, de que la fuerza del conocimiento científico radica en el “carácter general, universal, necesario y objetivo de su veracidad” ya que las ciencias investigarían leyes objetivas. La contradicción que yo creo apreciar estriba en que, por un lado, la ciencia puede ser universal, necesaria y objetiva y, por otro lado, esa misma ciencia es partidista, es una ciencia de un partido, de la clase trabajadora soviética, en última instancia, donde la ciencia, por fin, se convierte en una unidad teórico-práctica. ¿Cómo es posible que la ciencia sea a la vez partidista, a la vez una superestructura, una determinada forma de conciencia social, pero, al mismo tiempo, sus verdades sean universales, necesarias y objetivas? A mi juicio esta contradicción no queda de ninguna manera solucionada porque, en todo caso, las verdades científicas anteriores a la ciencia soviética, pongamos por caso las verdades de la mecánica newtoniana, de la química del siglo XIX, etc., esas verdades no dejarían de ser universales, necesarias y objetivas, pero, a la vez, son “ciencia burguesa”, son una superestructura del modo de producción burgués capitalista. Esa “ciencia burguesa”, suponemos, luego es rectificada por la “ciencia verdadera soviética”, que es la que realmente establece la unidad entre teoría y praxis. Supuestamente, esa mecánica newtoniana y esa química clásica de Lavoisier y de Proust, en cuanto “ciencias burguesas” que eran, no habrían logrado establecer la unidad entre teoría y praxis, lo cual también es muy raro. Aquí se puede apreciar que la filosofía de la ciencia del materialismo histórico y dialéctico es muy limitada. La teoría de la verdad científica que se mantiene es la de la verdad científica como un espejo, como un reflejo en la superestructura de lo que está dado en la base, y esta teoría del reflejo es la idea de la ciencia como un mapa, un mapamundi: esto es lo que desde la teoría de la ciencia del materialismo buenista llamamos una idea de verdad científica descripcionista. La idea de verdad científica como descripción ha sido muy criticada porque partes muy importantes de las ciencias no se pueden explicar como si fueran formas de descripción de la realidad, como espejo de la realidad. Para el materialismo buenista, es la propia realidad considerada a cierta escala, como la realidad de las partículas subatómicas, la realidad de la evolución biológica, la realidad de los objetos estelares distantes, etc., la que se constituye a la vez que se constituyen las propias ciencias correspondientes: la microfísica, la biología, la astrofísica, etc.

    En esta entrada hemos puesto tres enlaces con otros tantos trabajos de Gustavo Bueno. El primero es sobre las acepciones de la palabra ciencia, un texto tomado del Diccionario filosófico, porque en el Diccionario soviético no se distinguen los diferentes usos de la palabra “ciencia” y esa falta de distinción es una de las fuentes de esta confusión a la que me he referido. En el materialismo filosófico se distinguen usos generales de la palabra “ciencia”, como cuando se habla de la ciencia militar o de la ciencia política, etc., frente a usos más específicos como cuando se habla de la ciencia moderna, la ciencia en sentido estricto, como la mecánica, las matemáticas, la química moderna, etc. La segunda entrada es un trabajo de Gustavo Bueno sobre la función actual de la ciencia, un texto que todo el que quiera tratar de este asunto en serio tendría que leer: este texto incide sobre el problema de si la ciencia es básica o superestructural, y sobre cuál es su función, lo que afecta a la cuestión nuclear de qué es la ciencia. La ciencia no es tanto un reflejo de la realidad, sino que la ciencia, en muchos momentos, es la constitución de la realidad de una manera sui generis, como cuando se constituye la realidad de la microfísica o la realidad matemática o la realidad de la evolución biológica. En la tercera entrada se explica resumidamente la teoría del cierre categorial, y también puede valer para completar esta idea de ciencia ya que, desde luego, la idea de ciencia del materialismo histórico y dialéctico es completamente insuficiente y esto afecta a muchas partes de su filosofía ya que la filosofía de la ciencia, en su relación con la ontología y con la gnoseología, es una parte muy importante de cualquier sistema filosófico.

    David Alvargonzález

  • Acepciones de ciencia (Diccionario filosófico)
  • Gustavo Bueno, La función actual de la ciencia
  • Gustavo Bueno, III. La respuesta de la teoría del cierre categorial. Líneas generales del materialismo gnoseológico (¿Qué es la ciencia?, Pentalfa, Oviedo 1995)

 
→ Edición conjunta del Diccionario soviético de filosofía · índice de artículos del DSF
Las cuatro versiones soviéticas del Diccionario filosófico de Rosental e Iudin
Diccionario filosófico marxista · Rosental & Iudin · Montevideo 1946
Diccionario de filosofía y sociología marxista · Iudin & Rosental · Buenos Aires 1959
Diccionario filosófico abreviado · Rosental & Iudin · Montevideo 1959
Diccionario filosófico · Rosental & Iudin · Montevideo 1965
Diccionario marxista de filosofía · Blauberg · México 1971
Diccionario de comunismo científico · Rumiántsev · Moscú 1981
Diccionario de filosofía · Frolov · Moscú 1984