Francisco de Araujo OP 1580-1664
Filósofo dominico español, también tenido por lusitano, formado desde 1601 en el Convento de San Esteban de Salamanca. Profesor de teología en el Convento de San Pablo de Burgos (1616-1617) y después en Salamanca, donde cubrió la cátedra de Prima de Teología, y fue prior del Convento de San Esteban. Desde 1648 a 1656 fue Obispo de Segovia, retirándose después al Convento del Rosario de Madrid, donde muere el 19 de marzo de 1664. Sus restos reposan en el Convento de San Esteban de Salamanca, con vestigios de santidad aún no reconocida por Roma: “eruditionis, & innocentiae, sanctitatisque fama […] quod nullis etsi conditum olim aromatibus unguentisve repertum est adhuc omnino integrum ac si ea die terrae inditum, nullo foetore inquinatum, membris omnibus non rigidis sed tractabilibus, quod Fratres iique qui aderant omnes obstupuerunt, & ex viri pietate dum vixerat, & hanc ejus post mortem a Deo concessam exuviis aeternitatis arrham augurabantur, & vestigium”, “e naõ tendo sido embalsamado se achou com admiraçaõ dos circunstantes, naõ sómente incorrupto, mas flexivel, e exhalando suave cheiro, sendo estes sinaes evidentes provas da gloria Celestial, que lograva o seu espirito”, “donde puede verse hoy mismo (1883) incorrupto e íntegro, sin que se hayan puesto en su sepulcro aromas ni preservativo de ningún género”, &c.
Escribió y publicó en latín once infolios (que suman 8.125 páginas de texto) que tuvieron gran influencia en su tiempo, pero que hoy permanecen prácticamente en el olvido: Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam, tomus primus (Burgos & Salamanca 1617, 16+850 págs.), Commentariorum in universam Aristotelis metaphisicam, tomus secundus (Salamanca 1631, 8+685+13 págs.), Opuscula tripartita hoc est in tres controversias triplicis theologiae divisa (Douai 1633, 16+664+5 págs.), De fide, spe et charitate in secundam secundae Angelici doctoris commentarius (Convento de San Esteban, Salamanca 1635, 12+705+50 págs.), In tertiam partem Divi Thomae Commentarii, tomus primus (Convento de San Esteban, Salamanca 1636, 14+763+19 págs.), In tertiam partem Divi Thomae Commentarii, tomus secundus (Convento de San Esteban, Salamanca 1636, 7+807+9 págs.), In primam secundae Divi Thomae lecturarum, tomus primus (Convento de San Esteban, Salamanca 1638, 16+758+42 págs.), In primam secundae commentariorum tomus secundus (Madrid 1646, 12+730+14 págs.), Commentariorum in primam partem Div. Thomae, tomus primus (Madrid 1647, 8+775 págs.), Commentariorum in primam partem Div. Thomae, tomus secundus (Madrid 1647, 4+770+14 págs.), Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum & ciuilem pertinentes (León de Francia 1664, 16+618+28 págs.; 2ª edición: Ginebra 1745, 14+618+28 págs.).
Mientras que los Comentarios sobre Aristóteles y Santo Tomás no tuvieron necesidad de ser reeditados, las Cuestiones morales, publicadas en León de Francia el mismo año 1664 de su muerte, tuvieron público para merecer ser reeditadas ochenta años después en Ginebra (Coloniae Allobrogum 1745), pues trataban asuntos de mayores controversias. Véase, por ejemplo, cómo el prolífico capuchino Martín de Torrecilla (1635-1709) tiene bien presente el nombre de Francisco de Araujo: unas 14 veces le cita en sus Consultas Morales de 1688³ (“Lo mismo tiene el Padre Fray Cristobal de San José, en su libro, intitulado Receptarum opinionum moralium, tom. 1. tract. 22. sobre la Bula de la Cruzada, part. 2. dub. 2. desde el num. 7. pag. 130. y cita por este sentir en dicho num. 7 y en el 14, después de la dicha Constitución Urbana, a Luis de la Cruz, a Pedro de León, a Trullench, y a Leandro, que la tiene por probable, y dice, que la enseñó in voce, el Ilustrísimo, y Doctísimo señor Don Fray Francisco de Araujo, Dominicano, Catedrático de Prima de Teología en Salamanca, y Obispo de Segovia, cuando dicho Autor escribía lo dicho: Imò, lo tiene dicho Ilustrísimo señor, y doctísimo Maestro Araujo in decissionibus moralib. tract. I. quaest. 8. num. 28. fol. 51. según el doctísimo Padre Maestro Mora, que le cita…”); unas 122 veces le cita en el Tomo cuarto apologético de 1699 (“La mayor consta de la deposición de el Sapientísimo Maestro el Ilustrísimo Señor Don Francisco de Araujo, Catedrático de Prima en la Universidad de Salamanca, y después meritísimo Obispo de Segovia, que lo respondió así, consultado sobre el punto, al R. P. Fr. Leandro del Santísimo Sacramento, que lo testifica…”); unas 310 veces le cita en el Tomo sexto apologético de 1705 (“A que se añade, que la Majestad de Felipe Cuarto, suplicó a la Santidad del mismo Urbano, que no se expresase en su Bula la sobredicha excepción de los Regulares, como lo testifica el Ilustrísimo señor Araujo, en sus decisiones Morales…”), &c.
Las obras de Araujo están disponibles libremente en facsímiles digitales realizados independientemente por instituciones españolas y extranjeras (más abajo se ofrecen algunos de los enlaces). Todavía no ha sido traducido al español.
Algunos bibliógrafos apresurados (hasta funcionarios de la Biblioteca Nacional de España) atribuyen por error al dominico Francisco de Araujo obras firmadas por un coetáneo homónimo, licenciado y capellán que circulaba por Nápoles: Historia de los mártires de la ciudad de Otrento (Nápoles 1631, 92 págs.) y Vaso de tribulación y Testamento del alma (Nápoles 1646, 190 págs.). Otros, paletos narcisistas, creen ensalzarle sumando apellidos e inventando nombres que no tuvo ni utilizó (“Francisco Fidalgo de Araujo”, “Francisco de Araujo y Chaves”).
¿ Arvasius ? ≈ Aravjo → Aravio → Aravius
Hodiernos introducen sinonimia entre Francisco de Araujo y un desconocido Arvasius, ignorado por los clásicos, y que no es sino degenerada evolución de la errónea lectura de Araujo como Aravio, más tarde latinizado Aravius, presente en jesuitas tratadistas de moral y de las disputas de auxiliis; error que con el tiempo queda elevado a la condición de alias o sinónimo por Stanonik en KL 1882.
En España se leía Araujo: Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam, Burgos y Salamanca 1617
El tipógrafo de Douai lo confunde como Arauyo: Opuscula Tripartita, Duaci 1633
Con la X se evitaban errores: Decisiones Morales, Lugduni 1664
La transformación corrupta de Araujo en Aravio se advierte sobre todo en obras elaboradas por soldados de la Compañía de Jesús, sin que necesariamente deba suponerse malicia jesuítica contra el dominico... Así Cristóbal Todtfeller SI (1623-1678), Centum quaestiones ex universa theologia scholastica, Praga 1671; Alberto Castner SI (1638-1702), Conclusionum selectarum ex praelectionibus, Augsburgo 1675; nuevas ediciones de la Medulla theologiae moralis de Hermann Busenbaum SI (1600-1668), Venecia 1698; o de la Synopsis totius cursus theologici accuratissima de Jacobo Platel SI (1608-1681), Coloniae 1698, &c.:
Christophorus Todtfeller SI, Centum quaestiones ex universa theologia scholastica, Praga 1671, pág. 190.
Albert Castner SI, Conclusionum selectarum ex praelectionibus, Augsburgo 1675, pág. 105.
Hermann Busenbaum SI, Medulla theologiae moralis, Venecia 1698, pág. 614.
Jacobo Platel SI, Synopsis totius cursus theologici accuratissima, Colonia 1698, pág. 139.
Otro jesuita, Livino de Meyer SI (1655-1730), bajo el pseudónimo Teodoro Eleutherio, Historiae controversiarum de divinae gratiae auxiliis, Amberes 1705, culmina la lectura errónea de Araujo como Aravio al introducir el nominativo Aravius, &c.:
Teodoro Eleutherio (Livino de Meyer SI), Historiae controversiarum de divinae gratiae auxiliis, Amberes 1705, pág. 163 e índice.
¶ “Araujo (Arauxo) oder Aravius... […] Aravius gehört zu den bedeutenderen Vertretern der Thomistenschule in seine Zeit”: Franc Stanonik (1841-1918) en Wetzer & Welte, Kirchenlexikon, 2ª ed., Friburgo 1882, vol. 1, cols. 1228-1229.
¶ Anton Michelitsch (1865-1958), Kommentatoren zur Summa Theologiae des Hl. Thomas von Aquin, Graz und Wien 1924, pág. 3: “4. Araujo (Arauxo, Aravius), Franc. de, OP (1580-1664, bedeutender Theologe OP, 1648 Bischof von Segovia).”
¶ El Index nominum de las Actas Congressus Scotistici Internationalis (Oxford-Edimburgo 11-17 septiembre 1966), vol. IV, Scotismus decurse saeculorum, Roma 1968, página 818, dice: “Arvasius (de) Fr., vide Araujo (de) Fr. | Araujo (Arvasius) (de) Fr., 463, 486, 514”, tres menciones de Enrique del Sagrado Corazón de Jesús OCD [Enrique Llamas Martínez 1926], “Juan Duns Escoto en la doctrina de los Salmanticenses sobre el motivo de la encarnación” (463: “La teología española alcanzó la cima de madurez y de equilibrio en la segunda mitad del siglo XVI y la primera del XVII: Suárez, Ripalda, Vázquez, Cornejo de Pedrosa, Araujo, Godoy, Báñez, Medina, por no citar más que unos nombres, son exponentes de esa floración, cuyo principal escenario fue la Universidad de Salamanca”; 486: “De la misma manera, [Juan de la Anunciación] no tiene reparo en llamar la atención a un teólogo tomista tan respetado y ponderado en el Cursus, como Araujo, porque, a su juicio, había interpretado errónea y equívocadamente a Escoto”; 514: “Varios son citados a lo largo de los tratados del Cursus, como los manuscritos de Pedro de Herrera, de Curiel, de Tomás Hurtado, de Araujo, &c.”).
¶ Horst Dieter Rauh (1940), Das Bild des Antichrist im Mittelalter: von Tyconius zum deutschen Symbolismus, Münster 1973, interesado por los antilulistas, menciona “10. Araújo (Araúxo, Arvasius), Franciscus OP (1580-1664). Geb. 1580 in Verín (Galicien)…” (pág. 23).
¶ En un sitio de internet checo mantenido por la Česká dominikánská provincie (Provincia Bohemiæ), dedican una página, como personalidad de tal orden, a Francisco de Araujo (a) Araujo (Arvasius) František, tomistický filosof a teolog, aunque también es verdad que al pobre le atribuyen el Libro de tientos y discursos de musica practica, y theorica de organo..., de Francisco Correa de Araujo (1584-1654).
¶ Recientes repertorios tedescos pregonan: “Francisco de Araujo (Francisco Araúxo, Franz Arvasius; 1580-1664), spanischer Theologe”.
Sobre Francisco de Araujo
Martínez Sueiro (1919) menciona que fray Antonio de Remesal OP (hacia 1575-después de 1627), dominico de San Esteban de Salamanca, legó en su testamento “7.764 reales de plata doble para que los escritores de la casa tuvieran con qué publicar sus obras”, de los que se habría beneficiado Araujo, pues 300 ducados se gastaron en Salamanca en publicar sus comentarios sobre Santo Tomás.
1649 Juan Martínez de Prado OP tiene que puntualizar
En vida de Francisco de Araujo, que acababa de ser elevado el año anterior al obispado de Segovia, sólo un año después de aparecer los últimos infolios que publicó en vida (los dos tomos de comentarios a la primera parte del divino Tomás, Madrid 1647) –pues las Decisiones morales (León de Francia 1664) son póstumas–, tiene su coetáneo Juan Martínez de Prado OP (†1668) que puntualizar lo siguiente en su Metafísica, todavía bien calientes las cuestiones de auxiliis:
Secundae partis. - Controversia XII. De subordinatione causae secundae ad primam. - Articulus II. Utrum concursus Dei generalis causas secundas ad agendum praemoneat; seu applicet, & praedeterminet? - § II. Magister Albelda, & Magister Araujo non deferunt aliorum placitum.
«§ II. Non deferunt aliorum assertum M. Albelda, & M. Araujo. […] 42. Item M. Аraujo ex propia sententia. Tractatus de gratia aditus nomine М. Araujo, non est illius. Et adhuc illi autor docet auxilia gratiae esse intrinsice efficacia: in quo opponitur Authoribus scientiae mediae, quoad praecipuam difficultatem, de qua est totalis.
M. Fr. Franciscus Araujo, tunc primarius Salmanticensis, & nunc Segoviensis Episcopus, ita scriptum reliquit lib. 8. Met. q. 9, art. 4. dub. appendice n. 35. Secunda sententia affirmans est, quam sequuntur omnes veri discipuli S. Thomae, cum suo Authore agnoscentes huiusmodi concursum pranium efficacem in omnibus causis secundis, tam liberis, quam necessariis, tam in ordine naturae, quam gratiae, ad earum operationes necessarium. Haec ille, quod pluribus argumentis, & authoritatibus confirmat.
Ingenue tamen fateor, non satis coherere haec cum his, quae nuper edidit 1.2. q.III. art.5. dub.6. a pag. 455. ¶ Respondeo tamen, hic loqui ex aliena sententia: nam tractatus ille alienis laboribus est compositus: nam ut saepissime gravissimi viti testati sunt; Sapientissimus M. permissive illum tracatatum (qui in Bibliotheca соmmuni, proprii authoris nouline asternabatur) cum suis imprimi; ne cogeretur vir ad alia natus, & distractus, currente praelo integrum tractatum de Gratia de novo elaborare.
Alienum tamen faetum esse, suadent non pauca; in primis quia easdem difficultates bis pertractat, primo breviter, ut ipsi moris est; secundo late, ut author illius tractatus solebat. Secundo: styli ingens diversitas, ut quilibet, vel parum versatus in scriptis sapientissimi Magistri, animadvertere poterit. Tertio: nam in reliquis suis operibus, brevissime difficultates ingentes pertractat, in isto vero opere, etiam in minimis, satis divagatur. Quarto, evidentius id ostenditur: nam de illo tractatu sub eodemmet titulo, meminit Magister Fr. Ioannes Vicentius, in Relectione de Gratia Christi q. 7. pagina 905, in editione Romana anni 1591. fere quinquaginta quinque annis antequam ederetur à Mag. Araujo. Ergo non est eius opusculum. De nique: quia hoc non est novum in praedicto Magistro. Nam hoc alii adverterunt in tractatu de Eucharistia, & praesertim negari non debet, quod dubium illud magnum, de conversione aquae in vinum; quod apud ipsum habetur 3. part. quaest. 78. artic. 4. dub. 2. eisdem verbis, & syllabis, habetur prius editum à Magist. Fr. Basilio Legionensi: ut sola utriusque lectione constabit.»
(Juan Martínez de Prado, Controversiae Metaphysicales Sacrae Theologiae, tomus primus, Compluti 1649, págs. 518-519.)
1672 En la Bibliotheca Hispana Nova
Francisco de Araujo, sólo ocho años después de su muerte, es incorporado por Nicolás Antonio (1617-1684) al primer tomo de su Bibliotheca Hispana Nova (Roma 1672). Un siglo y una década después, la nueva edición de esa obra (Ibarra, Madrid 1783, págs. 402-403) replica la misma entrada, con mínimos ajustes en abreviaturas y puntuación que no afectan al contenido, sin corregir por tanto los errores ya advertidos en 1721 por Jacobo Echard. Versión madrileña seguida, más de dos siglos después, en la traducción española (Madrid 1999) ejecutada por la menéndezpelayista Fundación Universitaria Española Dulce Nombre de Jesús y San Antonio.
«F. Franciscus de Arauxo, nobili loco in Gallaecia provincia, ejusque ut dicitur, oppido, quod Verin vocant, Monteregi proximo natus, ordini fratrum Praedicatorum nomen dixit in Stephaniana Salmanticae urbis domo; datoque sui in theologica re profectus, eaque maxime, quae a schola denominatur, specimine apud Abulenses sodales, qui sub Angelici Praeceptoris appellatione Academiam domi suae habent, in latiorem bene merendi de Hispana juventute campum translatus fuit, Salmanticaeque professorem agere jussus. Hic post minores alias, ex duabus primariis sacri studii cathedris eam adeptus est, quae matutino tempore, hoc est, praecipuo loco, Dominicanis tantum praeceptoribus ex scholae ipsius praescripto conferri debet. Quo munere functum, & post solemne Iubilei vicennium Academica donatum rude, urbs Segovia Ecclesiae suae Praesulem fortita est XIII. die Ianuarii MDCXLVIII. Post octo tamen administrationis annos, non tantum recusavit modeste Carthaginensem sibi oblatam, sed & sponsae veteri bona gratia nuntium remisit, annuente Innocentio X. qui reservavit ei pensionem congruam, privatum ut se ille, atque onere vacuum aleret. Matritum, ergo in curiam veniens, non ut curiae ambiret munia, sed ut sibi, & studiis vacaret, procul ab omni animarum cura, ad statum se composuit imminentem obitus diem suscipiendi. Qui quidem initio anni MDCLXIII. praeparato importunus non accidit. Theologiam omnem doctissimis commentariis perlustravit, & illustravit maxime; quibus famam suam haud obscuram pervenire ad posteros fecit.
Ea sunt hoc ordine edita in lucem:
De Fide, Spe, & Charitate in Secundam Secunda Angelici Doctoris commentarius. Salmanticae apud S. Stephanum 1635. fol.
In Tertiam partem Commentariorum tomus prior, hoc est, De Verbo Incarnato. ibidem 1636. in folio.
In Tertiam partem Commentariorum tomus posterior, hoc est, De Sacramentis. ibidem eodem anno.
In Primam Secundae D. Thomae lecturarum tomus primus: ibidem 1638. fol.
In Primam Secundae Commentariorum tomus secundus; sive Tractatus de Divina gratia, justificatione, & merito. Matriti apud Melchiorem Sanchez 1646. folio.
In Primam partem D. Thomae Commentariorum tomus primus usque ad quaestionem XXIII. ibidem 1647. in fol.
In Primam partem Commentariorum tomus secundus usque ad quaestionem LXIV. Ibidem eodem anno.
Praemiserat his omnibus:
Commentariorum in universam Aristotelis Metaphysicam tomos duos. Salmanticae 1631.
Posthuma autem typis mandata sunt:
Varia & Selecta Decisiones morales ad Statum Ecclesiasticum & Civilem pertinentes, Lugduni apud Philippum Borde & socios anno 1664. in folio.»
(Nicolás Antonio, Bibliotheca Hispana Nova, Roma 1672, tomo 1, pág. 308.)
Consta la temprana presencia de ejemplares de Francisco de Araujo en la Nueva España: «Memoria de los Libros que entraron de nuevo en la tienda de libros de Paula de Benavides Viuda de Bernardo Calderón, impresora de este Santo tribunal, el año de 1683: […] (91) Illmo P. Francisco de Araujo, Decisiones morales, Lugduni, Sunptibus Philipi Borda, anno 1664» (relación transcrita por Irving A. Leonard, “On the Mexican Book Trade, 1683”, The Hispanic American Historical Review, agosto 1947, vol. 27, nº 3, pág. 425).
1683 «Arauxo (François). Evêque de Segovie, étoit Espagnol natif de Verin dans la Galice. Il étudia à Salamanque, où il entra dans l'Ordre de S. Dominique, & ensuite il y enseigna la Theologie. En 1648 il fut nommé à l'Evêché de Ségovie, & il est mort en 1663. Il a laissé huit ou dix Volumes in folio, de Theologie Scholastique. * Nicolas Antonio, Bibl. Hisp.» (Moreri, Le grand dictionnaire historique, Lyon 1683, tome I, pág. 356.)
1707 «Arauxo (François). Evêque de Segovie, étoit Espagnol, & natif de Verin dans la Galice. Il étudia à Salamanque, où il entra dans l'Ordre de S. Dominique, & ensuite il y enseigna la Theologie. En 1648 il fut nommé à l'Evêché de Ségovie, & mourut en 1663. Il a laissé huit ou dix volumes in folio de Theologie Scholastique. * Nicolas Antonio, Bibl. Hispan.» (Moreri, Le grand dictionnaire historique, París 1707, tome I, pág. 324.)
1721 En olor de santidad
Jacobo Echard OP (1644-1724) publica el tomo segundo de Scriptores Ordinis Praedicatorum Recensiti (París 1721), tras culminar dos años antes el tomo primero que había iniciado Jacobo Quetif OP (1618-1698), Scriptores Ordinis Praedicatorum Recensiti. Tomus primus (París 1719). Medio siglo después de la muerte de Araujo, Jacobo Echard calcula la fecha de su nacimiento, al advertir que en su primera obra se dice que tenía 35 años en 1615; salva el error de Nicolás Antonio respecto del año en que murió, que no fue 1663 sino 1664, y resalta los vestigios de santidad observados al trasladar su cuerpo incorrupto. También se preocupa por disociar a Francisco de Araujo de la polémica de auxiliis. (Obviamente no puede mencionar la reedición de Ginebra 1745.)
«F. Franciscus de Arauxo † 1664. F. Franciscus de Arauxo nobili loco comitatus de Monterey in Gallaecia vernacule Verin dicto circa MDLXXX natus, nobili & genere oriundus, patre Johanne Idalgo re & nomine, viro gravi opulento, magnaeque apud concives auctoritatis & aestimationis, matre Francisca de Chaves Arauxo ex eodem loco & castro de Chaves antiquo municipio Gallaeciae Lusitaniae finitimo, unde clara & antiqua de Chaves familia titulum accepit & nomen, adolescens ordini Salmanticae die quinta martii MDCI voto solenni sacramentum dedit: ubi postquam egregie litteris sacris operam posuisset, easque subinde variis provinciae suae locis diu docuisset, (anno MDCXVI & sequenti theologiam legerat in conventu S. Pauli Burgensis) cum autem Complutum jam accessisset apud suos eodem munere functurus, Salmanticam eodem anno MDCXVII evocatus est, & F. Petro de Herrera jam rude donato suffectus in primaria theologiae cathedra matutina, quae nostrorum propria est, quam annis quidem sex prioribus vices Herrerae supplens substitutionis titulo primum rexit, exinde vero proprio jure obtinuit, annisque viginti solidis maxima sui & ordinis fama administravit. Ut eruditione apud omnes, sic & morum innocentia & facilitate claruit, tantaeque fuit apud optimates, aulicos, & regni proceres aestimationis & auctoritatis, ut nonnulla quorumdam christianae fidei puritati divinoque cultui parum aequa praeverterit averteritque aulicorum consilia. Recti quoque tenacissimus fuit, adulari blandirique nescius, qui quamvis ab omni fastu supercilioque alienus esset & humilis, ubi res exigeret, magna fiducia fortique animo viros etiam principes intrepidus arguebat, & veritatis admonebat, quorum ob id forte aliquorum in se provocavit invidiam, sed frustra. Nam tantae erat apud catholici regis Philippi IV majestatem auctoritatis & ponderis, ut regem testentur aliquando asseruisse, [610] se vel si caeteri omnes eruditi & theologi de aliquo rogati per ipsum idem sentirent sibique consulerent, unusque ex adverso Arauxo contrarium consuleret & pronunciaret, spretis caeterorum & abjectis omnium sententiis, unius Arauxo secuturum & amplexurum consilia. Hinc post viginti annos ab academia Salmanticensi rude donatum ad ecclesiae Segobiensis infulas Urbano VIII rex catholicus praesentavit anno MDCXLVIII januarii tertia, quam annis duntaxat octo circiter optime rexit, gregi suo carissimus, pauperum vere pater, in adversis patientissimus, in prosperis modestissimus & humilis, in disciplina regulari constantissimus, qui nec pristinum vitae modum & abstinentiam, pastoralis etiam solicitudinis onere pressus, immutare voluit. Verum aetate jam ingravescente ad tranquillioris vitae portum appellere cupidus, & sibi ipsi vacare Deoque imposterum avidus, dum ad Carthaginensem ecclesiam destinaretur & vocaretur, & Segobiensem maximo suorum praesertim pauperum luctu abdicavit anno MDCLVIII, moxque ad suos reversus Fratres annos complures summa humilitate animi & religione, privatus, ab omni rerum cura temporalium alienissimus, modica contentus, quam in ejus honestos neccessariosque vitae usus ex episcopalis mensae Segobiensis censu concesserat Innocentius X, pensione Matriti vixit, ubi & octogenario major quam assidue meditabatur laetus aspexit mortem, & ad quam se dudum composverat, quamque anhelabat & expectaverat aeternitatem invenit die XIX martii, non ut Antonius habet MDCLXIII, sed uti noster certius annotavit Hyacinthus de Parra anno sequenti MDCLXIV. Magno parentatum ei tunc apparatu, magno & omnium ordinum confluxu, magna qui vixerat & obierat apud omnes & eruditionis, & innocentiae, sanctitatisque fama. Post annos vero circiter quinque Matrito Salmanticam a F. Manuele de Ibarça de Rojas comitis de Moras fratre germano tunc priore Salmanticensi ejus corpus translatum est, quod nullis etsi conditum olim aromatibus unguentisve repertum est adhuc omnino integrum ac si ea die terrae inditum, nullo foetore inquinatum, membris omnibus non rigidis sed tractabilibus, quod Fratres iique qui aderant omnes obstupuerunt, & ex viri pietate dum vixerat, & hanc ejus post mortem a Deo concessam exuviis aeternitatis arrham augurabantur, & vestigium. De quo legendus Antonius de Lorea Vitae F. Petri de Tapia Hispalensis archiepiscopi cap. XI, §. 3, pag. 79. Haec sunt ejus opera:
1. Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam T. I, quinque libros complectens, Burgis & Salmanticae, Jo. Bapt. Varesii, & Antoniae Ramirez viduae 1617 in fol. pagg. 850. Initio se jam primariae cathedrae Salmanticensis moderatorem praestat, ad calce testatur se opus complevisse XXIV junii MDCXV, aetatis XXXV: ex quo colligo natum anno MDLXXX.
2. Commentariorum eorumdem T. II. Alteram utriusque editionem refert Antonius in Bibl. Hisp. Salmanticae 1631. Notandum in hoc T. II quod habet auctor Lib. 8 quaest. 9 art. 4 dub. Append. n. 35 de praemotione physica. Secunda sententia, inquit, affirmans est, quam fequuntur omnes veri discipuli S. Thoma cum suo auctore agnoscentes hujusmodi concursum pravium efficacem in omnibus causis secundis tam liberis quam necessariis, tam in ordine natura quam gratia, ad earum operationes necessarium. Sic refert noster Joannes Martinez de Prado Metaphys. T. I pag. 518.
3. Opuscula tripartita hoc est in tres controversiis triplicis theologia divisa. In quarum prima a varia disputationes de pure scholastica, in secunda de morali, & in tertia de expositiva theologia utiliter expenduntur, Duaci, Bartholomaei Bardon 1633 in 8 pagg. 664. Hoc opus omisit Antonius citatus.
4. Tomus I super primam partem angelici Doctoris, Matriti, Melchioris Sanchez 1647 in fol. pagg. 775. Continet 23 QQ. priores. In quo T. I notandum quod habet Q. 23 A. 6 Dub. 2, An ultra certitudinem praescientiae, includat praedestinatio certitudinem causalitatis? Pag. 749. «Tertia sententia communiter recepta a Thomistis asserit praedestinationem esse certam utraque certitudine, scilicet praescientiae & causalitatis propter efficaciam decreti divini, & mediorum electorum independenter a praescientia futuri consensus liberi arbitrii. Et pag. 750. Dico 3. Ex duplici capite sumitur certitudo causalitatis in praedestinatione, nimirum ex divini decreti efficacia & immutabilitate, atque ex efficacia quam habent auxilia praeparata fuapte natura. Haec conclusio statuitur pro auctoribus tertiae sententiae. Et pag. 751. Ultiman partem hujus conclusionis probat: nimirum, inquit, quod haec efficacia auxiliorum, ex qua sumitur certitudo causalitatis conveniat eis ex ipsorum natura suadetur 1. ex scriptura 2. ex Augustino De gratia Christi c. 24 dicente: Legant & intelligant atque fateantur non lege atque doctrina insonante forinsecus, sed interna atque occulta mirabili & ineffabili potestate Deum operari in cordibus hominum non solum veras revelationes, sed etiam veras bonas voluntates. Haec autem potestas mirabilis & occulta non potest non esse auxilium physicum praeveniens & de se efficax, quem propterea appellat victricem delectationem, quia cum suavitate ac delectatione fortiter movet & inclinat voluntatem. Ergo.» Quod & amplius probat ex ratione causae primae, & secundae, & in sequentibus eamdem Thomistarum sententiam astruit cum distinctione sensus compositi & divisi. Et dub. 3 pag. 754, Quae sit vera ratio concordia inter certitudinem divinae praedestinationis, & usum humanae libertatis? Rejecta concordia Molinae ex scientia media, «Dico 3. Vera ratio hujus concordiae desumenda est ex efficacia divinae voluntatis, & ejus decreti independenter a praescientia futuri usus liberi arbitrii praedeterminantis nostras voluntates ad illum. Quod probat eo quod efficacia divinae voluntatis tanta est, ut attingat substantiam, & modum actuum nostrae libertatis, & non solum velit efficaciter ut nostri actus fiant, sed etiam ut liberè & contingenter fiant &c.» Cum autem hic T. I sit ultimum hujus opus, hinc constat hunc auctorem a communi Thomistarum sententia nunquam descivisse.
5. Tomus II in I. P. D. Thoma a q. 27 ad 64. Ibidem 1647 in fol. pagg. 769.
6. T. I in primam secundae D. T. a q. 1 ad 99, Salmanticae, Ex typographia conventus nostri S. Stephani 1638 in fol. pp. 758. Adjecta est Relectio defensiva sententiae, sive Apologia pro doctrina, quam pro defensione ecclesiastica immunitatis defendit auctor more & rigore scholastico in tractatu de legibus, pp. 12.
7. T. II in primam secundae ad Tractatum de divina gratiae supernaturalibus donis, super QQ. ultimas, Matriri, Melchioris Sanchez 1646 in fol. pp. 732. De hoc tomo sic loquitur noster Joannes Martinez de Prado Controvers. Metaphys. T. I Compluti 1649 in fol. pagg. 518. «Respondeo tamen (M. F. Franciscum Araujo nunc Segoviensem episcopum) hic loqui ex aliena sententia. Nam tractatus ille (de gratia) alienis laboribus est compositus. Nam ut saepissime gravissimi viri [611] testati sunt, sapientissimus magister permisit illum tractatum (qui in bibliotheca communi proprii auctoris nomine asservabatur) cum suis imprimi: ne cogeretur vir ad alia natus & distractus, currente praelo integrum tractatum de gratia de novo elaborare. Alienum tamen foetum esse suadent non pauca: in primis quia easdem difficultates bis pertractat: primo breviter ut ipsi moris est: secundo late ut auctor illius tractatus solebat: 2. styli ingens diversitas, ut quilibet vel parum versatus in scriptis sapientissimi magistri animadvertere poterit: 3. nam in reliquis suis operibus brevissime difficultates ingentes pertractat, in isto vero opere etiam in minimis satis divagatur: 4. Id evidentius ostenditur. Nam de illo tractatu sub eodemmet titulo meminit M. F. Joannes Vincentius in Relectione de gratia Christi q. 7 pag. 905 Edit. Romanae anni 1591, fere 55 annis antequam edetetur a M. Araujo. Ergo non est ejus opusculum. Denique quia hoc non est novum in praedicto Magistro. Nam hoc alii adverterunt in Tractatu de Eucharistia, & praesertim negari non debet, quod dubium illud magnum de conversione aquae in vinum, quod apud ipsum habetur 3 p. q. 78 a. 4 Dub. 2, eisdem verbis & syllabis habetur prius editum a M. F. Basilio Legionensi, ut sola utriusque lectione constabit.» Quae ipso vivente Araujo scribebat & edebat dictus de Prado, qui & ad marginem haec habet notanda: Tractatus de gratia editus nomine M. Araujo non est illius. Et adhuc illius auctor docet auxilia gratia esse intrinsece efficacia, in quo opponitur auctoribus scientiae media quoad praecipuam difficultatem. Neque est quod dicat quis hunc Tractatum etsi non suum tamen ut suum adoptasse, & agnoscere T. I in l. P. D. Thomae pag. 753. Nam etsi id concedatur, ibidem praeter praemotionem moralem, quam solam agnoverat etsi certo efficacem auctor tractatus dicti de gratia, necessarium agnoscit Araujo praevium concursum physicum, quo Deus in ratione causae primae causam secundam seu voluntatem creatam de actu primo reducat efficaciter & necessitate consequentiae licet non consequentis in actum secundum: sicque in illo T. I ultimo suorum operum retractat quod in Tractatu illo de gratia antea edito de ea difficultate minus plene dictum fuerat. Adde & illa pag. 753 Araujo testari se specialem tractatum de auxiliis divina gratia composuisse edendum, quando ipsi licuerit per sedem apostolicam typis mandare. Ex quo sequitur in illo Tractatu sub suo nomine edito De gratia mentem suam haud dubie communi Thomistarum sententiae conformem non plene explicatam. De quibus legesis nostrum Paulum Fasseau in opusculo, cui titulus Auctoritas Philalethis Eupistini ex auctorata pag. 402, & maxime Historiam congregationum de auxiliis a nostro Jacobo Hyacintho Serry editam Antuerpiae 1709 col. 611, & 773, ubi Araujum ab Eleutherii vitilitigationibus egregie vindicat, & Molinianae scholae non modo non faventem sed & infensissimum demonstrat.
8. In secundam secunda D. T. commentarius a q. 1 ad 46, Salmanticae, Typis conventus S. Stephani 1635. in fol. pp. 705.
9. T. I. in tertiam partem D. T. a. q. 1 ad 27, Salmanticae, lbid. 1636 in fol. pp. 763.
10. T. II in eandem tertiam partem a q. 60 ad 90, adjecto tractatu de Indulgentiis, lbid. 1636 in fol. pp. 807.
11. Varia & selecta decisiones morales ad statum ecclesiasticum & civilem pertinentes, Lugduni, Philippi Borde, Laur. Arnaud, Pet. Borde & Guil. Barbiert 1664 pp. 618.»
(Echard, Scriptores Ordinis Praedicatorum Recensiti, Tomus Secundus, Lutetiae Parisiorum MDCCXXI, págs. 609-611.)
1724 «Arauxo (François). Evêque de Segovie, étoit Espagnol, natif de Verin dans la Galice. Il étudia à Salamanque, où il entra dans l'Ordre de S. Dominique, & ensuite il y enseigna la Théologie. En 1648 il fut nommé à l'Evêché de Ségovie, & il est mort en 1663. Il a laissé huit ou dix Volumes in folio de Théologie Scholastique. * Nicolas Antonio, Bibl. Hisp.» (Moreri, Le grand dictionnaire historique, Amsterdam 1724, tome I, pág. 235.)
1731 «Arauxo (François). Evêque de Ségovie, étoit Espagnol, & naquit à Verin dans la Galice en 1580. Il étudia à Salamanque, où il entra dans l'Ordre de S. Dominique, & ensuite il y enseigna la Théologie. En 1648 il fut nommé à l'Evêché de Ségovie, & mourut le 19 Mars 1664. Il a laissé huit ou dix volumes in folio de Théologie scholastique. * Nicolas Antonio, bibl. Hispan. Echard, script. Ord. Praed.» (Moreri, Le grand dictionnaire historique, Basle 1731, tome I, pág. 480.)
1747 Lusitano por padre castellano y madre portuguesa
«D. Fr. Francisco de Araujo teve por Pays a D Joaõ Hidalgo Castelhano, e a Francisca de Araujo Portugueza, natural da Villa de Chaves, Praça de Armas na Provincia Transmontana, de quem tomou o apellido, e por patria ao lugar de Verim, junto a Monte Rey em o Reyno de Galiza, posto que Joaõ Soares de Brito Theatr. Lusit. Litter. escreva que tivera o seu berço na Villa de Chaves. Na idade de vinte e hum annos, em que o mundo o lizongeava com as suas enganosas delicias o deixou heroicamente professando o sagrado Instituto da Ordem dos Prégadores no Convento de Santo Estevaõ de Salamanca a 5 de Março de 1601, onde depois de se instruir nas Sciencias Escholasticas com geral admiraçaõ dos seus Mestres, as dictou em varios Conventos, principalmente em o de S. Paulo de Burgos, donde partindo para exercitar o mesmo ministerio em o de Alcalá, sendo jà Doutor na Faculdade da Theologia, foy chamado no anno de 1617, por Fr. Pedro de Herrera, Lente de Prima na Universidade de Salamanca para ser seu substituto, cujo lugar depois de exercitar por seis annos o regentou de propriedade pelo largo espaço de vinte com immortal fama da sua literatura, e naõ menor credito da Religiaõ Dominicana. Igual à profundidade das suas letras era a innocencia dos seus costumes, merecendo distintas estimaçoens das pessoas da primeira Jerarchia, assim Ecclesiastica, como Secular, principalmente da Magestade de Filipe IV, conformando-se sempre no voto, que lhe dava nas materias mais graves, em que era consultado, ainda que contra elle estivessem unanimes todos os Theologos de Hespanha. Como era taõ amante da verdade, como inimigo da adulaçaõ reprehendia intrepidamente os vicios, de que eraõ reos os Palacianos, e posto que conciliasse o odio de muitos, naõ foy bastante, para que cedesse do seu zelo Apostolico. Em premio das suas letras illustradas com tantas virtudes foy promovido à Cadeira Episcopal de Segovia a 3 de Janeiro de 1648, em cuja dignidade deixou para os seus fuccessores hum perfeito modello da obrigaçaõ pastoral, assim na vigilancia das ovelhas, como no soccorro dos pobres, e ornato dos Altares. Constrangido da idade provecta, em que se achava, naõ sómente regeitou a Mitra de Cartagena, a que estava destinado, mas renunciou a de Segovia no anno de 1658, com universal sentimento do seu rebanho, donde se retirou para o Convento de Madrid com huma moderada congrua concedida por Innocencio X. Neste domicilio viveo seis annos, preparando-se com actos religiosos para a eternidade, atè que chegada a hora de serem premiados os seus merecimentos, recebidos todos os Sacramentos entregou o espirito ao seu Creador a 19 de Março de 1664, e naõ de 1663, como escreve D. Nicolao Antonio Bib. Hisp. Tom 1, pag. 308 col. 2, quando contava 84 annos de idade. Celebráraõ-se sumptuosas exequias à sua memoria, a que assistiraõ as principaes pessoas da Corte de Madrid. Passados cinco annos determinou Fr. Manoel de Ibarça y Roxas irmaõ do Conde de Moras tresladar para o Convento de Salamanca, do qual era Prior, o cadaver deste illustre Prelado, e naõ tendo sido embalsamado se achou com admiraçaõ dos circunstantes, naõ sómente incorrupto, mas flexivel, e exhalando suave cheiro, sendo estes sinaes evidentes provas da gloria Celestial, que lograva o seu espirito. O seu nome he celebrado pelas vozes de grandes Escritores, como saõ Nicol. Anton. Bib. Hisp. Tom. I p. 308 col. 2. Theologiam omnem doctissimus commentariis per lustravit, & illustravit maxime quibus famam suam haud obscuram pervenire ad posteros fecit. Gravesson Hist. Ecclesiast. Tom 8. pag. mihi 129, col. 2, eximius Theologus. Echard, Script. Ord. Prae. Tom. 2, pag. 609, col. 2. Ut eruditione apud omnes, sic & morum innocentia, & facilitate claruit… in adversis patientissimus, in prosperis modestissimus, & humilis, in disciplina regulari constantissiumus. Henao Scient. Med. histor. propugn. Eventil, 6 n. 162. Quem nobiliorem Thomistam, nec ante nostrum saeculum, nec retroacta viderunt, & ibi n. 163. Oh celeber familiae Dominicanae magister & princeps Salmanticensis. Fr. Joan à Cruc. Praefat. Direct. Concient. §. 4. n. 8. Sapientissimus, & §. 12. n. 36. in quibus (fala das suas obras) miscellaneas quaestiones summa claritate & profunditate, quae huic authori similiter fuerunt innatae, resolvit. Torrecilla Cens. Moral. Trat. 2. de Penit. Consult. 5. n. 8. doctissimo. Dian. Tom. II. Part. 7. Resol. 28. Sapientissimus Magister. Vincent. Baron. Disput. I. Sect. I. fol. 27. assertorem D. Thomae, & fidelissimun discipulum. Hozes Zelo Pastoral Explic. de la prop. I. apend. 15. Doctissimo. Jacob. Hyacinth. Serry Histor. Congreg. de Auxil. lib. 4. cap. 27. Erat enim Theologi nomine vere dignus. Fr. Pedro Mont. Claustr. Domin. Tom. 3. pag. 48. e 210. Foy naõ só na Universidade de Salamanca, mas em todo o Reyno havido por Oraculo. Lorea Vid. de D. Fr. Ped. de Tap. Arceb. de Sevilha cap. II. §. 3. pag. 79. Magna Bib. Ecclesiast. Tom. I. pag. 531. col. 2. Compoz:
Commentariorum in universam Aristotelis Methaphysicam Tomus primus quinque libros complectens. Burgis apud Joan Baptistam Varesium, 1617. fol. & Salmanticae apud Antoniam Ramires Viduam 1617. fol. Nesta obra se intitula jà Lente de Prima em a Universidade de Salamanca, e que a acabara a 24 de Junho de 1615, quando contava 35 annos de idade.
Tomus fecundus. Salmanticae 1631. fol.
Opuscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis Theologiae divisa. In quarum prima variae disputationes de puro scholastica, in secunda de morali, et in tertia de expositiva Theologia utiliter expenduntur. Duaci apud Bartholomaeum Bardon. 1633. 8. Esta obra naõ chegou à noticia de Nicolao Antonio.
Tomus primus super primam partem Angelici Doctoris. Matriti apud Melchiorem Sanches 1647 fol.
Tomus fecundus in primam Partem D. Thomae á quaest. 27. ad 64. ibi per eumdem Typog. 1647 fol.
Tomus primus in primam secundae D. Thomae á quaest. I. ad 99. Salmanticae ex Conventu Dominicanorum Sancti Stephani 1638. fol.
Tomus secundus in primam secundae ad Tractatum de Divinae Gratiae supernaturalibus donis super quaestiones ultimas. Matriti apud Melchiorem Sanches 1646 fol.
In secundam secundae D. Thomae Commentarius á quaest. I ad 46. Salmanticae Typis Conventus S. Stephani 1635 fol.
Tomus primus in Tertiam partem D. Thomae á quaest. I ad 27. Salmanticae Typis Convent. S. Stephani. 1636 fol.
Tomus secundus in eadem Tertiam partem à quaesr. 60 ad 90. cum Tractatu de Indulgentiis Ibidem. 1636 fol.
Variae & selectae decisiones morales ad statum Ecclesiasticum, & Civilem pertinentes. Lugduni apud Philippum Borde, Laurent. Arnaud. Petr. Borde, & Guilielm. Barbier. 1664 fol.»
(Diogo Barbosa Machado [1682-1772], Bibliotheca lusitana historica, critica e cronologica, na qual se comprehende a noticia dos autores portuguezes, Lisboa MDCCXLVII, tomo II, págs. 110-112.)
1753 «Arauxo (Francisco). Obispo de Segovia, era Español, natural de Galicia; y estudió en Salamanca, donde entró en la Orden de Santo Domingo, y en adelante enseñó la Teología. El año de 1648 fue nombrado al Obispado de Segovia, y murió a 19 de Marzo de 1664. Dejó ocho o diez volúmenes in folio de Teología escolástica, impresos en España, y un Tomo de Decisiones Morales, Ecclesiasticae & Civiles, que se imprimió en León en el año de 1664, y últimamente el de 1745. * Echard, Script. Ord. Praedicat. Nicolás Antonio, Biblioth. Hispan.» (Moreri, El gran diccionario histórico, París & León de Francia 1753, tomo 1, pág. 659.)
1759 «Arauxo (François), évêque de Ségovie, étoit Espagnol, & naquit à Verin dans la Galice en 1580. Il étudia à Salamanque, où il entra dans l'ordre de S. Dominique, & ensuite il y enseigna la théologie. En 1648 il fut nommé à l'évêché de Ségovie, & mourut le 19 mars 1664. Il a laissé huit ou dix volumes in folio de théologie scholastique. * Nicolas Antonio, bibl. hispan. Echard, script. ord. praed.» (Moreri, Le grand dictionnaire historique, París 1759, tome premier, pág. 251.)
1760 «Arauxo (François d'), né à Verin dans la Galice, d'une des meilleures familles du pays, entra fort jeune dans l'Ordre de Saint-Dominique, & fit profession l'an 1601. Ayant fait ses études, il enseigna la Théologie à Bruges, ensuite à Complute, & il succéda enfin au fameux Pierre de Herréra du même ordre, dans la première chaire de Théologie de l'Université de Salamanque, où il enseigna pendant vingt ans avec la réputation du plus habile Théologien de son temps. Philippe IV, Roi d'Espagne l'avoit en telle vénération, qu'il disoit quelquefois que quand tous les Théologiens seroient d'un même avis sur quelque chose, il suffiroit que François d'Arauxo pensât autrement pour suivre le sien. Urbain VIII le nomma Archevêque de Ségovie, à la demande du Roi, en 1648. Cette dignité ne lui fit rien changer dans sa manière de vivre; les mêmes règles qu'il observoit dans son ordre, il se les prescrivit dans son palais dont l'entrée étoit ouverte à tous ceux qui avoient besoin de le consulter, & sur-tout aux pauvres dont il étoit véritablement le pere. Enfin dans le temps qu'on pensoit à le mettre sur le siège de Carthagene, il abdiqua celui de Ségovie, & se retira à Madrid dans le couvent de son ordre, pour ne penser qu'à son salut, loin du tumulte & des affaires du monde. Il y mourut âgé de plus de quatre-vingt ans le 19 de mars 1664. On transporta cinq ans après son corps à Salamanque. On dit qu'il étoit encore entier. Nous avons de lui plusieurs ouvrages de Théologie & de Philosophie. Les premiers sont des opuscules tripartites ou divisés de trois manières; c'est-à-dire, la scholastique, la morale & la positive; Douai, 1633 in-8°; des commentaires sur la somme de saint Thomas, tome 1, in-fol., à Madrid, 1647, tome 2, ibid. sur la 1re.2e à Salamanque, 1638, in-fol. Madrid, 1646, in-fol. 2 vol. sur la 2e 2e, à Salamanque, in-fol. 1635; sur la 3e partie, ibid., 2 tom. 1636. Décisions choisies sur l'état ecclésiastique & civil, Lyon, 1664. (Pere Echard, de script. ord. Praed. tom. 2, p. 609.)» (Dictionnaire Universel, dogmatique, canonique, historique, géographique et chronologique des sciences ecclésiastiques, par le R. P. Richard, & autres Religieux Dominicains. A Paris, 1760, tome premier, pág. 311.)
1822 «Arauxo (François d'), né à Verin dans la Galice, d'une des meilleures familles du pays, entra fort jeune dans l'Ordre de Saint-Dominique, et fit profession l'an 1601. Ayant fait ses études, il enseigna la théologie à Bruges, ensuite à Complute, et il succéda enfin au fameux Pierre de Herréra du même Ordre, dans la première chaire de théologie de l'Université de Salamanque, où il enseigna pendant vingt ans avec la réputation du plus habile théologien de son temps. Philippe IV, roi d'Espagne, l'avait en telle vénération, qu'il disait quelquefois que quand tous les théologiens seraient d'un même avis sur quelque chose, il suffirait que François d'Arauxo pensât autrement pour suivre le sien. Urbain VIII le nomma archevêque de Ségovie, à la demande du Roi, en 1648. Cette dignité ne lui fit rien changer dans sa manière de vivre; les mêmes règles qu'il observait dans son Ordre, il se les prescrivit dans son palais dont l'entrée était ouverte à tous ceux qui avaient besoin de le consulter, et surtout aux pauvres dont il était véritablement le père. Enfin dans le temps qu'on pensait à le mettre sur le siège de Carthagène, il abdiqua celui de Ségovie, et se retira à Madrid dans le couvent de son Ordre, pour ne penser qu'à son salut, loin du tumulte et des affaires du monde. Il y mourut âgé de plus de quatre-vingts ans, le 19 de mars 1664. On transporta cinq ans après son corps à Salamanque. On dit qu'il était encore entier. Nous avons de lui plusieurs ouvrages de théologie et de philosophie. Les premiers sont des opuscules tripartites ou divisés de trois manières; c'est-à-dire, la scholastique, la morale et la positive; Douai, 1633 in-8°; des commentaires sur la Somme de saint Thomas, t. 1, in-fol., à Madrid, 1647, t. 2, ibid. sur la 1re,2e à Salamanque, 1638, in-fol. Madrid, 1646, in-fol.; 2 vol. sur la 2e 2e, à Salamanque, in-fol. 1635; sur la 3e partie, ibid., tom. 2, 1636. Décisions choisies sur l'état ecclésiastique et civil, Lyon, 1664. (P. Echard, de script. ord. Praed. tom. 2, p. 609.)» (Bibliothèque Sacrée, ou Dictionnaire Universel historique, dogmatique, canonique, géographique et chronologique des sciences ecclésiastiques, par les révérends pères Richard et Giraud, dominicains. Réimprimée avec additions..., A Paris, 1822, tome troisième, pág. 6.)
1879 «El dominico Francisco de Araujo, que –trece años después del fallecimiento de Báñez– desempeñó durante dos decenios la mencionada cátedra de prima y que más tarde fue obispo de Segovia, dice así: “Resulta completamente asombroso que algunos teólogos novicios –muchos de los cuales siguen las opiniones de sus maestros sin someterlas a examen– pretendan que se deba tener en éstos tanta fe que los teólogos posteriores estemos obligados a creer sin dudar en ese concurso físico de Dios que predetermina la voluntad humana, del que ni los Sagrados Concilios ni los Santos Padres supieron nada, sino que ellos mismos se inventaron con discursos falaces”. Todavía va más allá en las lecciones que impartió en Salamanca en 1626. En ellas no sólo dice de los seguidores de la predeterminación que son “teólogos recién llegados”, sino que habla incluso de un “niño expuesto a las puertas del templo”.» (Gerhard Schneemann, S. I. [1829-1885], Origen y desarrollo de la controversia entre el tomismo y el molinismo (1879-80), traducción, estudio preliminar y notas por Juan Antonio Hevia Echevarría, Biblioteca Filosofía en español, Oviedo 2015, pág. 451.)
1882 «Araujo (Arauxo) oder Aravius, Franz de, bedeutender Theologe des Predigerordens, Bischof von Segovia, wurde 1580 zu Berin bei Monterrey in der spanischen Provinz Galicien geboren, legte 1601 zu Salamanca die Profess ab und lehrte in verschiedenen häusern deines Ordens die Theologie, bis ihm 1617 die erste theologische Lehrtanzel an der Universität zu Salamanca übertragen wurde, welche statutenmässig seinem Orden zutam. Diese bekleidete er zwanzig Jahre lang. Der Ruf seiner Gelehrsamkeit und seiner Tugenden verschaffte ihm grosses Ansehen bei Philipp IV, und seinem Hofe. Manche dem Glauben und der Kirche nachtheilige Makregel wurde seine freimüthigen Vorstellungen abgewendet. 1648 wurde er auf den Bischof Sich von Segovia erhoben. Nach achtjähriger eifriger Pflichterfüllung verzichtete er wegen vorgerüsten Alters freiwillig aus diese Würde, um sich zu Madrid in der Mitte seiner Ordensbrüder aus einen seligen Tod vorzubereiten. Er starb am 19 März 1664. Die Angabe “1663” bei Nicol. Antonio und in Gams Series episc. wird durch das Datum des bei Livin Meyer (Hist. controv. de auxil. I, l. 2, c. 22) erwähnten Briefes widerlegt. Er schrieb: Comment. in universam Aristotelis Metaphysucam, 2 voll., Salmant. 1617, 1631; Opuscula tripartita... variae disput. de pure scholastica, morali et expositiva theol., Duaci 1633; Commentaria in Summam S. Thomae, 7 voll., und zwar: in 2.2., Salmant. 1635; in 3. ib. 1636, 2 voll.; in 1.2. ib. 1638; in eandem II (de gratia), Matrit. 1646; in 1 (bis qu. 64), Matrit. 1647, 2 voll. Endlich: Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticu, et civil. pertinentes, Lugd. 1664 u. Colon. Allobrog. 1745 fo. Aravius gehört zu den bedeutenderen Vertretern der Thomistenschule in seine Zeit. Man hat viel darüber gestritten, welche Stellung er in der damaligen Streitfrage über das Verhältniss con Gnade und Freiheit eingenommen habe (vgl. Livin Meter [Theodor. Eleutherius] l. c. u. II, l. 2, c. 17; Hyac. Serry [Aug. Le Blanc], Hist. congreg. de aux. l. 4, c. 22). So viel ist klar, dass er den Ausdruck praedeterminatio physica nicht billigt, dass er aber doch die gratia ex se efficax vertheidigt. Wie er sich jedoch die praedeterminatio moralis denkt, und ob er nicht einen der Willensentscheidung vorausgehenden concursus physicus Dei für nöthig hält, kann hier nicht untersucht werden. Nur muss noch aus die von Joh. Martinez de Prado ausgesprochene und mit guten Gründen unterstützte Behauptung hingewiesen werden, dass der zweite Band des Comment. in 1.2 (de gratia) nicht Aravius eigenes Wert, sondern nur ein mit seiner Erlaubniss seinem Werte einverleibter Abdruck eines älteren Manuscriptes aus der Rlosterbibliothek ist und nicht in Allem seine Anficht wiedergicht. (Vgl. hier über und zum Ganzen: Quetif et Echard, Script. O. Praed. II, 609 ss.; Mich. a S. Joseph, Bibl. crit. II, 270; Nic. Antonio, Bibl. hisp. nova I, 402 s. (ed. 2); Hurter, Nomencl. lit. II, 4 ss.) [Stanonik.]» [Franc Stanonik 1841-1918] (Wetzer und Welte's Kirchenlexikon, Zweite Auslage, Friburgo de Brisgovia 1882, vol. 1, cols. 1228-1229.)
1883 Recordatorio de Fr. Ramón Martínez Vigil OP
Un año antes de ser nombrado Obispo de Oviedo, se publica la entrada que Ramón Martínez Vigil OP (1840-1904) dedica a Francisco de Araujo en el Diccionario de Ciencias Eclesiásticas. Se preocupa el amigo del cardenal Zeferino González OP (1831-1894) por recordar que Araujo no es el autor del tratado de Gracia que aparece en el tomo II de sus comentarios de la Prima Secundae de Santo Tomás…, lo que ya había dejado advertido en su momento el también dominico Juan Martínez de Prado (†1668), coetáneo de Araujo:
«Araujo (Francisco de). De la Orden de Predicadores. Nació en Verin (Galicia) en 1580, de Juan Hidalgo y Francisca de Chaves Araujo. Profesó en Salamanca el 5 de Marzo de 1601. Fue catedrático en Alcalá, Burgos, y Salamanca, distinguiéndose en todas partes por su vasta erudición , por el candor de su vida y por el don de consejo, de que tanto aprecio hacia en él el rey Felipe IV. En 1648, después de veinte años de enseñanza en la Universidad de Salamanca, fue preconizado Obispo de Segovia, cuya Iglesia gobernó diez años, mereciendo entre otros títulos el de padre de los pobres. Cuando le destinaban a la Iglesia de Cartagena, se retiró a su amada celda, con profunda pena de una y otra Iglesia, y vivió retirado en Madrid, hasta la edad de más de 70 años, muriendo tranquilamente el 19 de Marzo de 1654. Cinco años después fueron sus restos trasladados al convento de San Esteban de Salamanca, donde puede verse hoy mismo (1883) incorrupto e íntegro, sin que se hayan puesto en su sepulcro aromas ni preservativo de ningún género.
Dejó las siguientes obras literarias: Dos tomos de Comentarios sobre la metafísica de Aristóteles; siete tomos de Comentarios sobre la Suma de Santo Tomás; tres opúsculos de controversia teológica, y varias Decisiones selectas acerca del estado eclesiástico y civil. Estas obras fueron impresas en diferentes puntos, debiendo advertir únicamente que el tratado de la Gracia inserto en el tomo II de la exposición de la Prima Secundae de Santo Tomás, no es del Padre Araujo, ni está conforme con el resto de su doctrina. El Padre Araujo permitió que se insertase en dicho tomo, mientras que él pudiese publicar el que tenía compuesto: Quando ipsi licuerit per Sedem Apostolicam typis mandare. Fr. R. Martínez Vigil.»
1887 «Araujo (D. Francisco), estudió en Salamanca, donde tomó el hábito de nuestro Padre Santo Domingo, y enseñó después la Theología; en 1648 fue nombrado Obispo de Segovia, y murió a 19 de Marzo de 1664, en cuyo año se imprimió un tomo suyo de Decisiones morales eclesiasticae et civiles en León, y últimamente en 1745. También dejó ocho o diez volumenes en folio de Theologia escolastica, impresos en España. Moreri: t. 1º, f. 659. Parece que era natural de Verín en la Limia, según Montevelo en las notas al Nobiliario del conde Don Pedro, f. 19, plana 369.» (José Pardiñas Villalobos, Breve compendio de los varones ilustres de Galicia, Biblioteca Gallega, La Coruña 1887, pág. 3.)
1887 El tomo segundo del Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano, publicado por Montaner y Simón en Barcelona, ignora a Francisco de Araujo (quien tampoco aparece en su Apéndice de 1898 ni en el Segundo apéndice de 1907).
1909 «Araujo (François de), né en 1580, à Vérin, dans la Galice, d'une noble famille. Entra dans l'ordre des frères précheurs à Salamanque où il fit profession en 1601. Après avoir achevé ses études, il enseigna dans diverses maisons de sa province. Nommé en 1617 comme suppléant à Pierre de Herrera, O. P., à la première chaire de théologie de l'université de Salamanque, il en devint, six ans plus tard, le titulaire, et l'occupa jusqu'en 1648. Il fut promu, le 28 mars de cette même année, à l'évêché de Ségovie qu'il administra jusqu'en 1656. Démissionnaire et retiré dans son ordre à Madrid, il mourut saintement comme il avait vécu, estimé de tous, surtout des grands dont il était souvent le conseil, le 19 mars 1664. ¶ 1º Araujo a publié des commentaires de la Somme théologique de saint Thomas qui sont très réputés. Ils comprennent sept volumes in-fol., édités, les uns à Salamanque, les autres à Madrid de 1635 à 1647, sans que l'ordre de publication corresponde à celui de la Somme théologique. De nombreuses polémiques ont été soulevées pour déterminer l'opinion d'Araujo sur les questions de la prédestination et de la grâce. Dans le tome second sur la Ia IIae, un traité de la grâce est intercalé qui semble incliner vers les idées molinistes. Mais on a démontré que ce traité n'est pas l'œuvre d'Araujo. Il suit en effet ailleurs les doctrines de saint Thomas d'une façon très ferme. Témoin le tome premier sur la Ia pars publié en 1647, c'est-à-dire une année après le volume qui contient le traité de la grâce. Entre autres choses, il se pose à la page 754 cette question: Quae sit vera ratio concordiae inter certitudinem divinae praedestinationis et usum humanae libertatis? Après avoir rejeté la théorie concordiste de Molina d'après la science moyenne, il écrit: Dico 3. Vera ratio hujus concordiae desumenda est ex efficacia divinae voluntatis et ejus decreti, independenter a praescientia futuri usus liberi arbitrii praedeterntinantis nostras voluntates ad illum. — 2º Opuscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis theologiae divisa. In quarum prima variae disputationes de pure scholastica, in secunda de morali, et in tertia de expositiva theologia utiliter expenduntur, in-8º, Douai, 1633. — 3º Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum et civilem pertinentes, in-fol., Lyon, 1664, 1745. ¶ Quétif-Echard, Scriptores ord. praed., t. I, p. 609; H. Serry, Historia congregationum de auxiliis, l. IV, c. xxvii; l. V, sect. III, c. xi; L. Meyer, Historia controversiarum de auxiliis gratiae, t. I, l. II, c. xxii; t. II, l. II, c. xvii; Dummermuth, Sanctus Thomas et doctrina praemotionis physicae, Paris, 1886, p. 582-588; Hurter, Nomenclator literarius, t. II, col. 5-7; Kirchenlexikon, 2ª édit., 1882, t. I, col. 1228-1229. P. Mandonnet.» [Pedro Mandonnet OP 1858-1936] (Alfredo Vacant (1852-1901) & Eugenio Mangenot (1856-1922), Dictionnaire de théologie catholique, deuxième tirage, París 1909, vol. I, part 2, cols. 1729-1730.)
«Araujo (Francisco de). Biog. Filósofo español, nacido en Verín, Galicia (1580-1664). En 1601, ingresó en la Orden dominicana en Salamanca. Enseñó en 1616-1617 en el convento de San Pablo de Burgos. De 1623 a 1648, enseñó teología en Salamanca. En la última fecha fue nombrado obispo de Segovia, sede que renunció en 1656, en cuyo año se retiró, hasta su muerte, a su convento de Madrid. Escribió un comentario sobre la Metafísica de Aristóteles (2 vol. 1617 y 1631); Opúsculo tripartita sobre teología (Douay, 1633); un comentario en siete volúmenes de la Summa de santo Tomás (Salamanca y Madrid, 1635-47), y Variae et selectae decisiones morales ad stat. eccles. et civil. pertinentes (Lyón, 1664; 2.ª ed. Colonia, 1745). Bibliogr. Quétif-Echard, Scriptores Ordin. Praedicat., t. I; Nicol. Antonio, Bibliotheca Hisp. Nova.» (Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana, José Espasa e Hijos Editores, Barcelona 1909, tomo 5, pág. 1236.)
1910 «3. Insignes s. Thomae interpretes fuere et quidem ex Praedicatorum ordine: Franciscus de Arauxo nobili genere oriundus in Gallaeciae oppido Verim prope Monterey c. 1580 natus. Postquam aliis in locis theologiam docuerat, Salmanticam a. 1617 evocatus primariam ibidem cathedram viginti annos rexit. Ut eruditione apud omnes sic et morum innocentia et facilitate claruit, tantaeque fuit apud optimates, aulicos et regni proceres aestimationis et auctoritatis, ut nonnulla quorundam christianae fidei puritati divinoque cultui parum aequa praeverterit averteritque consilia. Imo ferunt Philippum IV aliquando asseruisse, si vel ceteri omnes eruditi et theologi de aliquo rogati per ipsum idem sentirent sibique consulerent, unusque ex adverso Arauxo contrarinm pronunciaret, spretis aliorum sententiis se unius Arauxo secuturum et amplexurum consilia. Recti quoque tenacissimus fuit adulari blandirique nescius, qui quamvis ab omni fastu supercilioque alienus esset et humilis, ubi res exigeret, magna fiducia fortique animo viros etiam principes intrepidus arguebat et veritatis admonebat, quorum ob id forte in se provocavit invidiam, sed frustra. Anno 1648 promotas fuit ad sedem episcopalem segobiensem, quam aliquot a vigilantissimus pastor tenuit, sed ingravescente aetate omnium, maxime vero pauperum, luctu abdicavit a. 1658; moxque ad fratres reversus reliquos vitae annos summa humilitate animi et religione ab omni rerum cura temporalium alienissimus Matriti vixit († 19. Mart. 1664). Praeter commentaria in universam Aristotelis metaphysicam, Salmanticae 1617, t. 2 in f.; ib. 1631, reliquit docta commentaria in Summam s. Thomae t. 7 in f., quorum 1. et 2. illustrant 1. p. Summae doctoris angelici, Matriti l647; t. 3. Salmanticae 1638 p. 1. 2; t. 4. Matriti 1646 reliquas qq. p. 1.2.; t. 5 Salmanticae 1635 p. 2.2 qq. 1-46; t. 6. et 7. p. 3., ib. 1636. Tr. de gratia, qui reperitur t. 4, ipsi nonnulli abjudicant. Id sane constat, eum non probasse praedeterminationem physicam, quamvis gratiam ex sese efficacem admiserit(¹). Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum et civilem pertinentes, Lugduni 1664; Coloniae Allobrogum 1745 in f., quae a censoribus admodum laudantur; Opuscula tripartita h. e. in tres controversias triplicis theologiae divisas, in quarum 1. variae disp. de pure scholastica, in 2. de morali et in 3. de expositiva theologia utiliter expenduntur, Duaci 1633 in 8. In theologia morali auctor censetur gravis. (¹) Cf. Echard II, 609 ss., Martinez de Prado Controvers. metaphys. I, 518, Compluti 1649; Liv. Meyer Hist. controv. de aux. gr. t. I. l. 2 c. 22; t. II. l. 2 c. 17; Mart. Ortiz in crisi pacif. de examine thom. p. 3 ss. Matriti 1733; Mich. a s. Joseph II, 270; Dummermuth a. Thomas et doctrina praemotionis physicae, Parisiis 1886 p. 582-88; Stanonik KL. 1, 1228.» (Hugo Hurter SJ [1852-1914], Nomenclator Literarius Theologiae Catholicae, editio tertia, Innsbruck 1910, tomus IV, cols. 5-6.)
1913 «Francisco de Araujo. Spanish theologian, b. at Verin, Galicia, 1580; d. Madrid, 19 March, 1664. In 1601, he entered the Dominican Order at Salamanca. He taught theology (1616-17) in the convent of St. Paul at Burgos, and in the latter year was made assistant to Peter of Herrera, the principal professor of theology at Salamanca. Six years later he succeeded to the chair, and held it until 1648, when he was appointed Bishop of Sevogia. In 1656 he resigned his see, and retired to the convent of his order at Madrid. His writings are: Commentary on the "Metaphysics" of Aristotle (2 vols., Salamanca, 1617; 2d ed., ibid., 1631); Opuscula tripartita, h.e. in tres controversias triplicis theologiae divisa etc. (Douay, 1633); a commentary in seven volumes on the Summa of St. Thomas (Salamanca and Madrid, 1635-47); Variae et selectae decisiones morales ad stat. eccles. et civil. pertinentes (Lyons, 1664; 2d ed., Cologne, 1745). In the second volume of his commentary on the Prima Secundae there is a treatise on Predestination and Grace, the doctrine of which is Molinistic. Martinez de Prado has proved that this was not written by Araujo, who, in a later work, shows clearly his adherence to the Thomistic teaching on those questions. Quetif-Echard, Script. Ord. Praed., I, 609; Martinez de Prado, Metaphysica, I, 518; Nich. Antonio, Bibliotheca Hisp. Nova; Meyer, Hist. controversiarum de auxiliis gratiae, I, ii, c. xxiii, and II, ii, c. xvii; Serry, Hist. congregationum de auxiliis, IV, 27; V, iii, ii; Hurter, Nomenclator, II, 5-7; Dummermuth, S. Thomas et doctrina praemotionis physicae (Paris 1886), 582-588; Stanonik in Kirchenlex. (2d ed., 1882), I, 1228-1229. W. D. Noon.» [William Dominic Noon OP 1875-1952] (The Catholic Encyclopedia, The Encyclopedia Press, New York 1913, vol. 1.)
1922 «Fr. Francisco Fidalgo y Araujo. Insigne teólogo, más generalmente conocido por “Francisco de Araujo” y a quien Quetif-Echard (Scriptores Ordinis Praedicatorum, París 1721) llama también “Chaves de Araujo”. Según este nació hacía el año 1585 en la villa de Verín (Orense), siendo sus padres Juan y Francisca, propietarios acaudalados. Pasó a Salamanca a hacer los estudios de segunda enseñanza y en aquella ciudad profesó en la Orden dominicana en 5 de marzo de 1601. Los seis primeros años después de su profesión tuvo en el convento de Salamanca el cargo de lector de Artes, pasando después a lector de Teología en San Pablo de Burgos. Pasó luego a Alcalá y en 1617 volvió a Salamanca para explicar la cátedra de Prima de Teología, como suplente del Maestro Herrera, quedando después en propiedad, a los seis años, por jubilación de este. Desempeñó esta cátedra durante veinte años, en los cuales después de obtener el grado de presentado (1621), desempeñó por elección del claustro los cargos de P. Provincial, Definidor y Prior sucesivamente. En 13 de enero de 1648 fue nombrado Obispo de Segovia cuya sede rigió sabiamente durante ocho años; pero con una modestia y abnegación ejemplares puso en manos del Pontífice Inocencio X la renuncia de la Mitra al cabo de aquel tiempo retirándose al convento del Rosario de Madrid, donde vivió a lo sucesivo con el disfrute de una pensión a cargo de las rentas de aquel Obispado. Fernández Alonso dice que murió en 1663, pero Pardiños Villalobos concretando más la fecha, señala la de su fallecimiento en 19 de marzo de 1664. Dejó escritas las obras siguientes: “Comentarios a la Teología escolástica”; opúsculo tripartita o sea, “De fide, Spe et Charitate, in secundam secundae Angelici Doctoris comentarius” (1633); “Comentarios del verbo encarnado” (1635); “De Sacramentii” (1636); Lecturas de Santo Tomás (1636); “Comentarios de la divina gracia” (1638); “Nuevos comentarios” (1646); “Comentarios a la metafísica de Aristóteles” dos volúmenes (1617 y 1631) y “Variae et selecta Decissiones morales ad statum ecclesiasticum et civilem pertinentis” (1664).» (Manuel Molina Mera, “Biografías gallegas. Fr. Francisco Fidalgo y Araujo”, El Eco de Santiago, Martes 4 de Julio de 1922, pág. 1.)
1924 «Araujo (Francisco), dominicain, né à Verin (Galice) de parents portugais, en 1580. Il fit profession au couvent de Saint-Étienne de Salamanque, et fut supérieur de divers couvents de son ordre, en particulier de celui de Saint-Paul de Burgos. En 1617, il était appelé à remplacer Pedro de Herrera à l'université de Salamanque. Il fut nommé évêque de Ségovie, le 3 janvier 1648, refusa l'évêché de Carthagène et, en 1658, se démit de son siège. Il mourut à Madrid, le 19 mars 1664, dans un couvent de son ordre, où il s'était retiré. ¶ Il a publié: Commentaria in Aristotelis Metaphysicam, 2 vol., Burgos, 1617; Salamanque, 1631; – Opuscula tripartita, Douai, 1633; – In primam, secundam et tertiam partem D. Thomae, 7 vol., Salamanque, 1636-1647; – Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum, et civilem pertinentes, Lyon, 1664. ¶ Diogo Barbosa Machado, Bibliotheca lusitana, Lisbonne, 1747, t. II, p. 110 sq. – Nicolás Antonio, Bibliotheca hispana, 1672, t. I, p. 308. – Échard, Script. ord. Praed., t. II, col. 609-11. Fortunato de Almeida.» [Fortunato de Almeida Pereira de Andrade 1869-1933] (Dictionnaire d'histoire et de géographie ecclésiastiques, publié sous la direction de Mgr Alfred Baudrillart, París 1924, vol. 3, col. 1445.)
«4. Araujo (Arauxo, Aravius), Franc. de, OP (1580-1664, bedeutender Theologe OP, 1648 Bischof von Segovia), Commentaria in Summam S. Thomae, 1634-1647, 7 t., und zwar: in 2 II, Salmant. 1635; in III, ib., 1636, 2 t.; in 1 II, ib., 1638; in eandem II (de gratia), Matrit., 1647, 2 t. Stanonik im KL I, 1228, 1229. QE II, 610, 611. Hurter IV³. 6. KlHl I, 311.» «Araujo, Franc., OP, v. n. 4. Araujo war zwar Gegner der scientia media, aber auch der praedeterminatio physica, un lehrte einen unfehlbaren Kongruismus. Dadurch ist er von der Thomisternschule abgewichen, wie auch Serry (bei Liv. de Meyer, Hist. contr., 1705, l. II c. 22, p. 161) bedingungsweise zugesteht. ¶ Araujo sagt (T. II in 1 II, p. 468, bei Meyer, l c, p. 162): “...Quod quidan dicunt, Deum voluntatem quoad exercitium ad primum actum determinare, ita quod in sensu composito nequeat in actum illum non prodire, etsi in sensu diviso libere eum eliciat, mihi est parum probabile; quia cum illa determinatio sit ab auctore naturae et sit proveniens ex intrinseca ipsius voluntatis natura, si illam admittimus, simpliciter et in omni sensu necessitare debet voluntatem ad illum actum... Ergo cum Deus humanam voluntatem summa cum suavitate regulariter moveat, et proportionabiliter ad eius naturam, consectaneum est rationi, dicere, quod, regulariter loquendo, Deus non praedeterminat voluntatem efficaci auxilio physico, sed morali et suasorio, mediisque moralibus ipsam ad bona supernaturalia inclinat et allicit.” ¶ Kurz fasst Araujo seine Meinung zusammen in einem Briefe aus Madrid, 12 Dezember 1663, an P. Henao SJ (Meyer, l. c. p. 168), in welchem er sagt: “Respondeo, quod fuerim in iuventute mea nutritus in praedeterminationibus physicis. Sed postea aetate magis provectus, conformavi me R. P. Magistri Ioannis Vincentii ¹ moralibus. Pono tamen illas efficaces, et independentes a scientia media, ita ut nec sim praedeterminans physicus, nec praevidens futurorum conditionatorum ante decretum...” (¹ Über ihn und Mantius OP s. Vincente, n. 309 m.)» (Anton Michelitsch [1865-1958], Kommentatoren zur Summa Theologiae des Hl. Thomas von Aquin, Graz und Wien 1924, págs. 3 y 82-83.)
1935 «Segobien(sis) (Segovia) in Hispania. […] ob. Petri | Franciscus de Arauxo (de Arauz), O. P. 12 | 13 Ian. 1648 | AC 19 f. 109'. (12) Reserv. pens. 4530 duc. etc. ut supra, c. decr... erig. ut supra (AC 19 f. 109'); nat. in oppido de Verin Compostellan. dioce., aet. circ. 48 an. [a. 1647], nomin. r. cath. 19 Sept. 1647 (P. Cons. 47 ff. 306, 303). In prof. fidei (l. c. f. 307) “de Arauxo”, et a nonnullis “de Arauz” nuncupatur.» ([Conrado Eubel 1842-1923] Patricio Gauchat OMConv, Hierarchia Catholica medii et recentioris aevi, vol. IV, Monasterii (Münster) 1935, pág. 310.)
1950 «Araújo (Francisco de). Teólogo español (1580-1664), nacido en Verín (Galicia) y muerto en Madrid. En 1601 ingresó en la Orden dominicana en Salamanca, y durante los años 1616 y 1617, enseñó teología en el convento de San Pablo, de Burgos; en este último año, fue nombrado asistente de Pedro de Herrera, el principal profesor de teología de Salamanca. Seis años más tarde le sucedió en la cátedra, en la cual permaneció hasta 1648, año en que Araújo fue designado obispo de Segovia. Sin embargo, este último cargo fue resignado por él en 1656, con objeto de dedicarse a la vida de retiro en el convento que la Orden poseía en Madrid. Araújo escribió varias obras muy notables, cuyos títulos son los siguientes: Commentaria in universam Aristotelis metaphysicam (1617), Opuscula tripartita (1633), Commentaria in Summam S. Thomae (1635-1647) y Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum et civilem pertinentes (1664). En el segundo volumen de sus comentarios a la Prima secundae se halla un tratado sobre la predestinación y la gracia, doctrina de carácter totalmente molinístico. Pero autores como Martínez de Prado han demostrado claramente que este tratado no ha sido escrito por Araújo, ya que en trabajo posterior el teólogo de Verín demostró de forma evidente su adhesión a la doctrina de santo Tomás.» (Enciclopedia de la Religión Católica, Dalmau y Jover, Barcelona 1950, tomo I, columna 879.)
1962 «Cette doctrine lui parait trés avantageune au point de vue pastorale. Elle permet d'épargner un grand nombre de scrupules aux consciences délicates, trop facilement convaincues qu'elles commettent une faute au moins vénielle chaque fois qu'elles éprouvent ces impulsions sensuelless. En Espagne, le dominicain François Araujo (1580-1664)200 n'enseigne pas autre chose. Il fait un effort considérable pour trouver un appui à la doctrine commune dans les textes mêmes de S. Thomas, surtout en montrant que le Docteur Angélique n'a pas limité sa définition des mouvements naturels ou primo primi aux seuls mouvements d'origine physique. Il signale en particulier un passage de la I-II, question 17, article 7, où, après avoir dit que le mouvement dú a la disposition corporelle échappe à notre contrôle, S. Thomas fait cette remarque: “Il peut même arriver que le mouvement de l'appétit sensible se déclenche subitement sous l'impression d'une image ou d'une sensation. Un pareil mouvement échappe alors au commandement de la raison, bien que celle-ci, si elle l'eût prévu, eut pu l'empêcher.” De ce texte Araujo conclut que, dans la pensée de S. Thomas, même les mouvements provenant de l'imagination, s'ils son subits, ne tombent pas sous notre pouvoir et ne sont pas par conséquent répréhensibles. […] 200 Né de parents portuguais, Araujo fut professeur dans plusieurs maisons de son ordre, puis à l'université de Salamanque (1617-1637); cf. Quétif-Échard, Scriptores O. P., 2, col. 609-611; A. Michelitsch, Kommentatorem zur Summa Theologiae des hl. Thomas von Aquin, Vienne, 1924, p. 3. 82-83; F. de Almeida, art. Araujo Francisco, dans D.H.G.E., 3, col. 1445; A Walz, O.P., idem, dans L.T.K., 1, col. 801.» (Roger A. Couture, O.M.I., L'imputabilité morale des premiers mouvements de sensualité de Saint Thomas aux Salmanticenses, Presses de l'Université Grégorienne, Roma 1962, págs. 144-145.)
1966 Reivindicación “galleguista” de Francisco de Araujo
Francisco Elías de Tejada Spínola (1917-1978), catedrático de Filosofía del Derecho y adalid en su tiempo del pensamiento tradicionalista carlista, madrileño de procedencia extremeña, junto con su esposa Gabriela Pércopo, de procedencia napolitana, escriben El reino de Galicia hasta 1700 (Editorial Galaxia, Vigo 1966), con prólogo de Ramón Otero Pedrayo (1888-1976), a quien dedican el libro, tras más de veinte años de estudio del pensamiento político gallego: “o, para usar el lenguaje de los clásicos del pensamiento gallego, del Reino de Galicia, uno entre los integrantes, y aquí con condición primera de Reino primogénito, en la confederación monárquica que fueron las Españas”. Estudian “los dos precedentes celta y suevo, con las cinco etapas en que se formó el Reino de Galicia hasta la plenitud ideológica e institucional alcanzada en el siglo XVII”, y dedican varias páginas a Francisco de Araujo, siguiendo principalmente el estudio inédito manuscrito dispuesto por Juan Rodríguez Cabrero C. M. (1880-1949), al preparar su discurso de ingreso en 1945 en la Real Academia Gallega sobre Fr. Francisco Fidalgo de Araujo, que es como prefiere llamar a Francisco de Araujo:
«X. Latir Gallego bajo Felipe IV. c) La cuestión de la privanza: Francisco de Araujo.
4. A caballo entre el núcleo de los moralistas y el de los letrados, formalmente clasificable entre los primeros y por razón de sus argumentos catalogable entre los segundos, figura el dominico fray Francisco de Araújo o Fidalgo de Araújo, nacido en Verín hacia 1580, alumno del colegio jesuítico de Monterrey, que profesa en la orden dominicana el 5 de marzo de 1601 en el convento salmantino de San Esteban, saltando muy pronto al profesorado, pues desde 1617 hasta 1644 cubre nada menos que la cátedra de Prima de Teología en las aulas de la Universidad mayor de las Españas. Maestro en teología el 25 de abril de 1627, prior de San Esteban en el trienio que comienza en 1634, obispo de Segovia desde 1648, renuncia al obispado en 1656, pasando sus postreros años encerrado en el convento del Rosario de Madrid, donde falleció el 19 de marzo de 1664, trasladándose sus restos un lustro más tarde al mismo convento salmantino de San Esteban que conoció sus días de máxima gloria intelectual.
Aunque fray Francisco de Araújo puso relieves en su práctica de la humildad en términos que suscitaron la admiración de Manuel Murguía, acercóse a palacio en tanto grado que bendijo en 1620 el enlace del príncipe Felipe, pronto Felipe IV, con Isabel de Borbón y su parecer llegó a pesar tanto que solía decir Felipe IV preferirlo al de todos los demás teólogos juntos en caso de oposición, con ser tantos y de tan descomunal valía cuantos existían en las Españas de la primera mitad del siglo XVII, edad áurea de la teología entre nosotros.
En el terreno filosófico continuó la escuela tomista en la más radical de sus purezas, aunque con criterios independientes analizados por Juan Rodríguez Cabrero, en asuntos tan graves como caer del lado suareciano en la temática de la eucaristía, defender la Inmaculada concepción de la Virgen María o coincidir con Gabriel Vázquez en considerar la retribución de los méritos humanos más asunto de gratitud que de justicia (Manuel Murguía, Diccionario de escritores gallegos, I, 87a). En este campo sus escritos son soberbiamente amplísimos, gloria insigne del saber filosófico español del tiempo, algunos de los más egregios tratados que jamás haya producido pluma filosófica en las Españas y sin disputa los más excelsos salidos de la mano de un hijo de Galicia. Baste leer en prueba sencilla los dos tomos de sus Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam, las casi setecientas páginas de los densísimos Opuscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis Theologiae divisa (Bartholomé Bardou, Douai 1633), las omnicomprensivas lecciones de sus inmensos comentarios a la Summa aquinatense, dos a la primera parte (los dos tomos en Madrid, Melchor Sánchez, 1647), dos a la Prima secundae (el tomo I en Salamanca, Convento de San Esteban, 1638; el tomo II en Madrid, Melchos Sánchez, 1646), uno a la Secunda secundae (Salamanca, Convento de San Esteban, 1635) y dos a la tercera (Salamanca, Convento de San Esteban, dos tomos en 1636), por no citar más que los manejados por nosotros. Sin contar la inagotable erudición de que hace alardes en las Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum, et civilem pertinentes (Lugduni, apud Philippum Borde et socios, 1664), algunas de cuyas páginas cuéntanse entre las más clásicamente eficaces que pueda presentar la historia del pensamiento político español.
Pues la dificultad II de la disputa X del De statu civili (Decisiones, 476a-478b) resulta ejemplar doctrina permanente, con valía acrecida dadas las coyunturas en que la formuló su autor, en los años en que ejercía la privanza el Conde Duque de Olivares. Plantéase allí la cuestión de si es lícito a un monarca considerar a un determinado súbdito digno de amistad parigual no obstante la diferencia política que los separa y si esa relación amistosa puede transformarse en una delegación de las funciones reales en el gobierno, de suerte que el rey “otio vacet et á cura regiminis mancat liber” (Decisiones, 473ab). Dando la contestación de que delegación semejante hállase prohibida por los tres derechos natural, divino y humano positivo en virtud de tres razones: la de que Dios, al conferir la monarquía a un hombre sobre los demás, declara en ello el propósito de que la ejerza; la de que, si entrega el báculo a terceros, dejan de ser “pastores populurum” y por ende de cumplir los deberes de su oficio; y la de que obrando así incumplirían el pacto de la ley regia que los constituyó reyes, porque no llenarían la obligación contraída de gobernar y proteger a los suyos. Serían señores imperfectos, esto es tiranos, y al caer en tiranía perderían sus títulos reales. El monarca que dejase al cuidado de validos regir sus estados debe ser depuesto, pues el pueblo “licite et sancte posse aut ab usu regiminis suspendi” (Decisiones, 474a). No cabía mayor libertad ni afirmaciones más contundentes en días del Conde Duque de Olivares. De entregarle el gobierno de las Españas, Felipe IV se trocará en tirano, debiera ser depuesto del trono. Desde el derecho natural al de gentes, sobre las palancas del origen divino del poder y del pacto constituidor de la realeza, este dominico de Verín concluye tesis que entonces eran resueltamente explosivas. Y que semejantes cosas pudieran defenderse en aquellas coyunturas, dice de sobra mucho acerca de la libertad de que gozaban los pensadores políticos de la Galicia clásica.
Como filósofo del derecho sus doctrinas son las atañentes al intelectualismo tomista. Dios no puede discrepar del orden natural por él establecido e inscrito en la ley natural, de suerte que “praecepta iuris naturalis proprie indispensabilia sunt a Deo” (In Primam Secundae I, 593b), en la medida en que reflejan el orden concebido por la mente divina. Con la secuela lógica de obligar a la criatura racional; la ley positiva que no es justa con arreglo al derecho natural deja de ser ley, “quia potestas legislativa non est data in destructionem, sed in aedificationem” (In Primam Secundae I, 507a). Es que la ley es norma para los actos humanos, en manera que la voluntad siga siempre cerradamente las indicaciones del intelecto (In Primam Secundae I, 502b), siendo así que pertenece formalmente al intelecto práctico (In Primam Secundae I, 501ba).
Las demás doctrinas no dejan de ser harto significativas. Así la declaración de la guerra justa para ejercer el derecho que asista a quien la emprende, por él aplicada a la ocupación por Felipe II del reino de Portugal (Decisiones, 452b, 455b); la tabla de requisitos necesarios para que el “supremus princeps”, o sea quien no reconozca superior, pueda imponer tributos a sus vasallos: las de que sean necesarios, proporcionados a fin de no gravar más a los pobres que a los ricos según la justicia distributiva, la de que cesen de cobrarse cuando concluya la necesidad que los motivó (Decisiones 538a); pues de otra suerte dejan de obligar al súbdito (In Primam Secundae I, 518a); la regulación de las condiciones bajo las cuales, y no faltando a ellas, sea hacedera la venta de oficios públicos para acorrer fondos con que cubrir los públicos gastos: la de que la venta sea a personas idóneas y la de que en el ejercicio de los cargos adquiridos no esquilmen ni causen injusticias sobre los gobernados (Decisiones, 417b-418a). Casuística cabal que aminoraba los daños causados por un procedimiento fiscal entonces admitido.
En el campo canónico, en rieles de Contrarreforma, diputa al papa por encima del concilio, negando a éste la facultad de conocer en apelaciones contra los mandatos pontificios (Decisiones, 354b), los cuales solamente pueden ser reclamados ante el propio papa y en estrecho “actus humilitatis” (Decisiones, 359a). Al par que condena la simonía por pecado máximo (Decisiones, 549a-614b. Es la disputa XIV del De statu civile), siguiendo a la letra la exposición de Santo Tomás de Aquino acerca del particular.
Su valía en el cultivo del derecho internacional ha sido ponderada por Juan Rodríguez Cabrero (Fray Francisco Fidalgo de Araujo, 33). Fray Francisco de Araújo postula la estima del derecho natural como derecho dotado de positividad efectiva (In Primam Secundae I, 554b). Apoyándose en Santo Tomás, Prima secundae XLIV, 5, ad tertium, parte de que lo natural ofrece dos aspectos: la inclinación de la naturaleza y lo que la razón humana determina por pacto de los hombres para fijar normas de convivencia; de donde repita la distinción isidoriana entre el derecho de gentes y civil como partes del mismo derecho humano positivo, sacados respectivamente del derecho natural por conclusión o por determinación, o sea por las dos vías clásicas del pensamiento jurídico tomista. De donde que, frente a la inmutabilidad del derecho natural estricto, el derecho de gentes pueda ser mudable y dispensable, aun participando de la misma raíz en la naturaleza humana (In Primam Secundae I, 555a). El que para fray Francisco de Araújo el derecho de gentes resulta del pacto entre hombres, un pacto por supuesto apoyado en el invariable derecho natural (In Primam Secundae I, 557a). La fundamentación del derecho de gentes es de esta suerte a un tiempo novedosa y de autoridades antiguas. Fray Francisco de Araújo sabe operar magistralmente con las viejas notas del clásico jusnaturalismo medieval, aderezándolas en resultados tan brillantes como nuevos, sin apartarse ni un ápice del constante hontanar de la escuela en que se inscribía. Quien lea esta fundamentación suya del derecho de gentes, tan galana, tan aguda, tan penetrante y sugestiva, no podrá negarle la calidad egregia de los maestros.
La personalidad de Galicia en el seno de la confederación monárquica de las Españas tuvo asimismo en él uno de sus intérpretes más profundos, regalándoles una completa teoría de la cuestión en el terreno jurídico, cifra feliz, tal vez la más granada de todas, de la doctrina política de la Galicia clásica. Plantéase la cuestión de la necesidad o no de la promulgación de las leyes en cada uno de los reinos de la federativa monarquía, afirmando la necesidad de proclamaciones en cada uno de ellos aunque se tratase de la misma sola común ley, ya que son “diversa” entre si (In Primam Secundae I, 535a), unidos solamente en la persona del monarca. Pues aunque, escribe, “extrinsece quatenus sub principatu unius, non tamen eisdem legibus, neque eodem modo, neque in ordine ad eundem finem proximum gobernantur” (In Primam Secundae I, 535b). Por lo cual, concluirá soberbiamente expresando la teoría tradicional de las Españas varias y una, “tum etiam quia potestas legislativa Regis non potest extendi ultra id quam accepit ab ipso regno; quia Rex non habet aliam praeter sibi communicatam Regno: sed huiusmodi regnu aggregata coronas Castellae verbi gratia Aragonia, Lusitania, et Sicilia, et similia non transtulerunt in Regem Hispaniae potestatem legislativam nisi cum hac conditione, ut eorum proprias leges consuetudines, et exemptiones quibus antea sub Regibus propriis potiebantur, illaesas conservaret”.
De acuerdo con semejante visión de la realidad del reino patrio cuando busque ejemplos acudirá con preferencia al pasado de Galicia; así al justificar que las mujeres son aptas para ceñir corona, pondrá por argumento el caso de la hija de Pelayo, Hormesinda (In Primam Secundae I, 545a). Resultando en este punto imposible de recoger en su texto original el canto a Galicia que aparece en la dedicatoria de sus sus In tertiam partem D. Thomae commenitarii al enderezar el escrito a don Fernando de Andrade y Mendoza, el paisano que fuera obispo de Palencia y a la sazón regía la diócesis arzobispal de Burgos: “Sed quae ratio elligendi te in huius operis patronurn, et laboris nostri columen? Multiplex plane, quia Galaicum decus, illius Provintiae fausta proles, quae me genuit, ut sic Patrae amantissimae debitum pietatis cultum in te impenderem: illa inquam quae olim fuit florentissimum Suevorun reggnum, postea vero provintia in Gothorum regnum per inclytum Leobigildum redacta, haud infelice sorte; quae prima collum Evangelii jugo inter Hispanicas subiecit, et primo Evangelicae sementis Divi Jacobi Zebedaei protulit fructus: quam et ipse vita functus amoris ergo, corporis sui pignore ditavit, et in sepulchrum elegit, ex quo ingentem gloriam haec prouincia sibi supra caeteras comparavit... Huis igitur, tam excelsae Patriae” (In Tertiam parte I, primeros folios sin numerar). Palabras en que asume el íntegro aparato barroco de la dignificación de la patria Galicia, colofón bellísimo y apasionado de su teorización de la personificación jurídica del Reino.
Francisco de Araújo, entre moralizador y jurisconsulto, asombra por la capacidad expositiva, por el poderío argumentador y por la claridad meridiana con que saca conclusiones sin detenerse ante lo que pudiera ocasionar escándalo. Enamorado de la verdad, la aplica hasta donde sea necesario, incluso si la pluma ha de trocarse en bisturí político. Operando sobre el transfondo de la realidad de la confederación viva de las Españas grandes, que contempló con legítimos orgullos y a las que definió en la más perfecta y cabal doctrina política escrita por gallego.»
1971 «Francisco de Araújo (De Aravio, 1580-1664). Natural de Verín (Orense). Catedrático de prima (1621-48). Obispo de Segovia (1648). Escribió Commentaria in universam Aristotelis Metaphysicam I (Salamanca 1617); II (Salamanca 1631). Comentarios a la Suma: In III Partem (Salamanca 1634); In II-III (Salamanca 1638); II (Madrid 1646); In Iam Partem (Madrid 1647). Opuscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis Theologiae divisa, in quorum prima variae disputationes de pura Scholastica, in secunda de Morali, et in tertia de expositiva Theologia utiliter expenduntur (Douai 1633). Un pequeño párrafo intercalado en sus cuestiones sobre la gracia (I-II q.III a.5 dubium 6) ha dado ocasión para considerarlo como favorable al molinismo en la cuestión de la premoción física. Consiste en una interpolación de textos inéditos pertenecientes a Juan Vicente de Astorga, que están en contradicción con las doctrinas que Araújo expone en su comentario a la metafísica. Pero la explicación de este hecho permanece oscura28. {28} R. Hernández, O.P., Actividad universitaria de F. de Araújo: CT 92 (1965) 203-271. El profesor José Luis Fernández, de la Universidad de Navarra, prepara una importante obra, de próxima aparición, sobre la metafísica de Araújo.» «Índice de autores. […] Araújo, Francisco de († 1664) 342.» (Guillermo Fraile OP [1909-1970], Historia de la Filosofía española, desde la época romana hasta fines del siglo XVII (edición revisada y ultimada por Teófilo Urdanoz OP [1912-1987]), La Editorial Católica (Biblioteca de Autores Cristianos 327), Madrid 1971, págs. 342 y 400).
1972 En el Diccionario de Historia Eclesiástica de España
Ramón Hernández Martín OP (1932) ha estudiado a Francisco de Araujo (sin duda estimulado por los trabajos de Thomas Chrysostom O'Brien OP de 1961) en aspectos biográficos, al conmemorarse el tercer centenario de su muerte, en su lección inaugural del curso 1964-1965 en la Facultad de Teología de San Esteban de Salamanca, publicada como artículo en 1965 (disponible desde 2005 en el sitio de internet del autor). Al redactar esta entrada del Diccionario de Historia Eclesiástica de España era Ramón Hernández secretario de la Facultad de Teología de San Esteban de Salamanca:
«Araujo, Francisco de, OP (Verín [Orense] 1580 †Madrid 19-III-1664) teólogo y obispo. Ya era bachiller en Artes y había cursado tres cursos de Teología en la Universidad de Salamanca, cuando ingresó en el convento dominicano de esa ciudad, tomando el hábito el 4-III-1600. Enseñó Artes y fue maestro de estudiantes en dicho cenobio, yendo en 1615 como lector de Teología al convento de San Pablo de Burgos y al año siguiente al de Santo Tomás de Ávila. A principios de 1617 lo encontramos de nuevo en Salamanca como suplente de Pedro de Herrera en sus ausencias y recibiendo los grados de bachiller, licenciado y doctorado o maestro en Teología por la Universidad salmantina en los días 9 de enero, 3 de febrero y 28 de julio, respectivamente, del mencionado año. Al quedar vacante la cátedra de prima de Teología por jubilación de Pedro de Herrera, fue electo Araújo para sustituirle el 19-XI-1617 y, al emprender el maestro Herrera la ruta de los obispados, es nombrado catedrático en propiedad el 17-III-1625. Después de veinte años de brillante apostolado académico, es designado obispo de Segovia el 3-I-1648, dimitiendo la sede a los ocho años, como también el obispado de Cartagena que se le ofrecía y viviendo en Madrid hasta su muerte en el convento del Rosario. Sus restos incorruptos fueron trasladados a San Esteban de Salamanca cinco años más tarde y colocados sobre la puerta del trascoro, cuya sillería, obra de Alfonso Balbás, él costeó.
Obras: Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam tomus primus, quinque libros complectens, Salmanticae 1617; Commentariorum... septem libros complectens a sexto usque ad duodecimum inclusive, ib., 1631; De Fide, Spe et Charitate, in Secundam Secundae Angelici Doctoris Commentarium, ib., 1635; In Tertiam Partem Divi Thomae Commentarii, Tomus primus, ib., 1636; In Tertiam parten... Tomus secundus, ib., 1636; In Primam Secundae Divi Thomae lecturarum... Tomus primus, ib., 1638; In Primam Secundae Commentariorum, Tomus secundus, Matriti 1646; In Primam Partem Divi Thomae Commentariorum, Tomus primus, ib., 1647; In Primam Parten... secundus, ib., 1647; Sinodo diocesano... año 1648, ib., 1649; Variae et selectae Decisiones Morales ad statum ecclesiasticum et civilem pertinentes, Lugduni 1664.
Bibl.: M55, 609-611; O27 [J. Cuervo, Historiadores del Convento de San Esteban de Salamanca, 3 vols., Salamanca 1914],I,581-592; II,868-877; III, 611-612; Chrysostom O'Brien OP., El enigma de Francisco de Araújo, Salamanca 1962; R. Hernández, OP., Actividad universitaria de Francisco Araújo en los claustros salmantinos: R73 [La Ciencia Tomista],92(1965)203-271. R. Hernández.»
1973 «10. Araújo (Araúxo, Arvasius), Franciscus OP (1580-1664)10. Geb. 1580 in Verín (Galicien). Lehrer an mehreren Ordensstudien, 1617-1637 Professor an der Universität Salamanca. 1648 Bischof von Segovia; er resignierte 1656 un starb am 19.3.1664 in Madrid. ¶ Commentaria in Summam s. Thomae, 7 Bde, Salamanca-Madrid 1635-1647 [Paris, Bibl. Nat. D. 1096(6)]. ¶ Úber Lull: In III partem d. Thomae commentarii tom. I q. 1. art. 2 dub. 1 (Salamanca 1636, pag. 28-34): Notwendigkeit der Inkarnation. ¶ 10 R2 f. 116v n. 118; X5 f. 81v. Quétif II 609-613; Hurter IV 5-6; Michelitsch 3; Eubel IV 310; DHGE III 1445 (F. de Almeida); DThC I 1729-1730 (P. Mandonnet); LThK I 801 (A. Walz).» «Arvasius, Franciscus: 10.» (Horst Dieter Rauh [1940], Das Bild des Antichrist im Mittelalter: con Tyconius zum deutschen Symbolismus, Verlag Aschendorff, Münster 1973, págs. 23 y 24.)
1974 «Arauxo (Araujo), Franciscus de, O.P. 1580 Verin (Galicia) - 1664 Mar. 19 Madrid. 1601 entered the Order, Salamanca; taught in various places in the province of the Order, 1616-1625 substitute for the prima cathedra matutina for theology in the university, Salamanca; 1625-1648 titular professor in the prima cathedra matutina theologiae, there; 1648-1656 Bp. of Segovia; 1656 retired to Madrid. Antonio, I, 402f.; Quetif, II, 609-611; Gams, p. 71; DThC, I (1903), 1729f.; EFil, I (1957), 321. C. O'Brien, 'El Enigma de Francisco de Araujo', CTom, LXXXIX (1962), 221-266; xc (1963), 3-79. Michelitsch, III, 82f.; Ceñal, FEP, pp. 40-47. 1. Commentaria in universam Aristotelis Metaphysicam. Eds.: Burgos-Salamanca, 1617 (tomus primus quinque libros complectens [Vbv]); Salamanca, 1631 (tomus secundus septem libros complectens a sexto usque ad duodecimum inclusive [Mbn; Su]).» (Charles H. Lohr SJ [1925-2015], “Renaissance Latin Aristotle Commentaries: Authors A-B”, Studies in the Renaissance, Chicago 1974, vol. 21, pág. 247.)
1979 «A. Pensamiento tradicional. Decadencia escolástica. No hay una caída vertical. La vena escolástica, alcanzada su meta de esplendor en la divisoria de las dos centurias, se sostiene con pujanza sensiblemente invariable durante la primera mitad del siglo XVII. Todavía después del año 50 tenemos figuras de gran prestigio, como el Cardenal Juan de Lugo († 1660), Francisco de Araujo († 1664), Rodrigo de Arriaga († 1667) y Pedro de Godoy († 1686). Pero en la segunda vertiente del siglo XVII, y a lo largo del XVIII, el cuadro general que ofrece la Escolástica es el de una vida excesivamente estática y lánguida, en una repetición didáctica, muchas veces rutinaria, de Cursos y Comentarios.» - «Señalemos los Comentarios a la Metafísica, de Francisco de Araujo O. P.» - «Indice de nombres […] Araujo, F. de II 450 451.» (Luis Martínez Gómez SI [1911-1995], “Síntesis de Historia de la Filosofía Española”, en Johannes Hirschberger, Historia de la Filosofía, Editorial Herder, Barcelona 1979, págs. 450, 451 y 531.)
1980 «Araujo, Francisco de. Hijo de Juan Hidalgo y de Francisca de Chaves y Araujo, nació en Verín (Orense) hacia 1580. Ya había cursado tres años de Teología cuando el 5 de marzo de 1601 tomó el hábito dominico en el Convento de San Esteban de Salamanca y, concluidos sus estudios, en 1615 explicó Teología en el Convento de San Pablo de Burgos y al año siguiente en el de Santo Tomás de Ávila, regresando a Salamanca para suplir a su antiguo maestro, Pedro de Herrera, en la cátedra de Prima de Teología, tras de recibir el grado de Maestro el 28 de julio de 1617. El 17 de marzo de 1625 obtuvo en propiedad la cátedra de Prima –que desde 1606 pertenecía in perpetum a la Orden– ocupándola por más de veinte años hasta 1648, aunque, tras su Jubilación en 1644, tuvo como sustituto en la docencia a Pedro de Godoy. Ya por estos años era consejero de Felipe IV, quien lo propuso al Papa Urbano VIII para la Sede de Segovia, donde fue consagrado Obispo el 3 de enero de 1648. En 1659 renunció al obispado de Segovia y al de Cartagena para el que había sido propuesto, retirándose al Convento del Rosario de Madrid, donde pasó sus últimos años entregado al recogimiento y al estudio hasta el 19 de marzo de 1664 en que falleció. Sus restos yacen actualmente en el coro de la Iglesia del Convento de San Esteban de Salamanca. Figura de gran prestigio dentro de la Orden y entre los llamados renovadores de la Escolástica, su nombre se vio desde muy temprano envuelto en las famosas controversias De auxiliis sostenidas entre bañecianos y molinistas, a causa de un pasaje de su comentario a la I-II (c. 111, Dubium VI anejo al art. 5) en el que Juan Martínez de Ripalda S. I. denunció una presumible negación de la premoción física. No obstante, nuestro autor no parece, según las opiniones más recientes, haberse separado nunca del tomismo puro ni siquiera en este punto, cuya supuesta inclinación hacia el molinismo descansa en una simple apreciación terminológica. Respecto de la Lógica, como advierte W. Risse (Die Logik der Neuzeit, vol. I, p. 405), observa una mayor autonomía de esta ciencia en relación con la Metafísica de la sostenida por la escuela salmantina. Obras: […]. Estudios: […].» (Gonzalo Díaz Díaz [1931], Hombres y documentos de la filosofía española, CSIC, Madrid 1980, págs. 336-337.)
1981 Ni siquiera es mencionado Francisco de Araujo (en los índices alfabéticos) por José Luis Abellán García (1933), Historia crítica del pensamiento español, tomo 3: Del Barroco a la Ilustración (siglos XVII y XVIII), Espasa-Calpe, Madrid 1981, 918 págs. Tampoco en el tomo 2: La Edad de Oro (siglo XVI), Madrid 1979, ni el tomo 4, &c.
1983 «La tarea emprendida por Más, Suárez, Zúñiga y Ramoneda fue continuada en el siglo XVII por jesuitas y dominicos, como Francisco de Araújo, OP, Commentarium in universam Aristotelis metaphisicam (1631), 2 vols.; Juan Martínez de Prado, OP, Controversiae metaphisicales sacrae Theologiae ministrae, 1649, y otros.» (Melquiades Andrés, Capítulo VII: La Teología en el siglo XVI, tomo I, pág. 608) - «Esta proyección en la que se unen la fuerza creadora de la reforma teológica y el esfuerzo de síntesis conservadora –que más tarde habrá de convertirse en simple organización de formas estereotipadas– podemos hallarla, en mayor o menor grado, en los más significativos representantes de la teología tomista de finales del XVI y principios del XVII: en Domingo Báñez, Pedro de Herrera, Francisco de Araujo, Juan Vicente de Astorga, Pedro de Ledesma, Domingo de Guzmán, Alfonso de Luna, Vicente Ferré, Pedro de Tapia, Juan González de Albelda, Gregorio Martínez, Alfonso de Avendaño y tantos otros. Todos ellos escribieron comentarios a la Suma, en los que recogieron los hallazgos de las figuras más destacadas de la Reforma teológica y vertieron también sus esfuerzos de investigación personal. Pero, al margen de esta línea de continuidad...» (Bartolomé Parera, Capítulo VIII: La escuela tomista española en el siglo XVII, tomo II, pág. 10) - «Araujo, Francisco de: I-608; II-10.» (Historia de la Teología Española, obra elaborada en el Seminario Suárez de la Fundación Universitaria Española bajo la dirección de Melquiades Andrés Martínez, Madrid 1983 y 1987, 2 tomos, páginas I:608, II:10, II:928.)
1985 «Francisco de Araújo (De Aravio, 1580-1664). Natural de Verín (Orense). Catedrático de prima (1621-48). Obispo de Segovia (1648). Escribió Commentaria in universam Aristotelis Metaphysicam I (Salamanca 1617); II (Salamanca 1631). Comentarios a la Suma: In III Partem (Salamanca 1634); In II-II (Salamanca 1638); II (Madrid 1646); In Iam Partem (Madrid 1647). Opuscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis Theologiae divisa, in quorum prima variae disputationes de pura Scholastica, in secunda de Morali, et in tertia de expositiva Theologia utiliter expenduntur (Douai 1633). Un pequeño párrafo intercalado en sus cuestiones sobre la gracia (I-II q.III a.5 dubium 6) ha dado ocasión para considerarlo como favorable al molinismo en la cuestión de la premoción física. Consiste en una interpolación de textos inéditos pertenecientes a Juan Vicente de Astorga, que están en contradicción con las doctrinas que Araújo expone en su comentario a la metafísica. Pero la explicación de este hecho permanece oscura28. {28} R. Hernández, O.P., Actividad universitaria de F. de Araújo: CT 92 (1965) 203-271. Cf. José Luis Fernández Rodriguez, El ente de razón en Francisco de Araújo (Pamplona, EUNSA, 1972), quien somete a serio estudio la monumental Metafísica de Araújo, en especial el tema del ser real y ser de razón. De esta obra dice S. Ramírez, La Facultad de Teología de San Esteban de Salamanca (Salamanca 1948) p. 23: “Esta Metafísica de Araújo, junto con las obras de Domingo de Soto y Diego Mas, son de lo mejor que ha producido la filosofía española”.» «Índice de autores. […] Araújo, Francisco de († 1664) 350.» (Guillermo Fraile OP [1909-1970], Historia de la Filosofía española, desde la época romana hasta fines del siglo XVII (segunda edición revisada y ultimada por Teófilo Urdanoz OP [1912-1987]), La Editorial Católica (Biblioteca de Autores Cristianos 327), Madrid 1985, págs. 350-351 y 415).
2011 Yerros histórico académicos
El prolífico monje trapense Damián Yáñez Neira (1916-2015), orensano de adopción, fue encargado por la Real Academia de la Historia de redactar, para el Diccionario Biográfico Español, la entrada correspondiente a Francisco de Araujo. ¿Por qué escogió esa academia a un veterano cisterciense y no a cualquier sabio padre dominico? Quizá porque, para el rancio localismo académico, es más fácil juntar algunos cuentos del nacido en una provincia que atreverse a ofrecer una glosa valorativa del filósofo universal:
«Araujo, Francisco de. Verín (Orense), 1590 - Madrid, 19.III.1664. Filósofo, teólogo, dominico (OP), prior de San Esteban y obispo de Segovia, muerto en fama de santo.
Era hijo de Juan Fidalgo, familiar del Santo Oficio, y Francisca de Chaves y Araujo, de la casa solariega de los Chaves, en la villa del mismo nombre, e hija de un caballero de la Orden de Cristo. Dícese que hizo sus estudios de gramática y artes en el Colegio de la Compañía de Jesús de Monterrey, y el hecho de haber nacido en un hogar noble explica que le llevaran a estudiar Derecho a la Universidad de Salamanca, pero habiendo entablado contacto con los dominicos de San Esteban, solicitó el ingreso en la orden dominicana en 1600, profesando el 5 de marzo de 1601. Su formación resultó tan completa, que, una vez recibido el sacerdocio, le nombraron los superiores maestro de estudiantes en el mismo convento de San Esteban, del que salió para enseñar Teología en San Pablo de Burgos en 1617, de donde pasó al de Alcalá, y después a Salamanca, cuya cátedra de prima de Teología regentó, primero como sustituto, y luego como propietario por espacio de veintisiete años. Por dos veces se le eligió prior de San Esteban. Se dice que era hombre muy humilde, de una piedad sincera, muy austero en la comida, sobrio de palabras, poco comunicativo, y suave en el ejercicio de su autoridad. Sobresalió como excelente maestro y eran destellantes sus profundos conocimientos filosóficos y teológicos, así como muy diestro en cuestiones de derecho e historia.
Jubilado de su cátedra en 1644, le destinaron al convento del Rosario de Madrid, y de aquí marchó al poco tiempo a regir la diócesis de Segovia, para la que se le propuso el 3 de enero de 1648. Más tarde le nombraron para el obispado de Cartagena, que no aceptó, circunstancia que aprovechó para renunciar a la mitra segoviana, fundándose en su avanzada edad, lo que le fue admitido, retirándose a su amada celda del Rosario, donde desarrolló una gran labor apostólica, entregado de lleno a la oración y a las prácticas impuestas por la vida religiosa. Le tiraba más esto que el episcopado. Dicen que mereció las más altas consideraciones de Felipe IV y de los personajes más significados de la Corte, quienes acudían a él con sus problemas, y escuchaban su parecer como a un oráculo. Como hecho curioso, consta que cuando le preconizaron obispo de Segovia, mandó construir un humilde ataúd a fin de tenerlo constantemente a la vista, en el cual fue inhumado en el momento que le llamó el Señor. Cuando cinco años más tarde abrieron la sepultura para trasladar sus restos a Salamanca, hallaron el cadáver incorrupto y permaneció en el mismo estado durante muchos años.
Aquella ansiedad por el retiro y la vida espiritual que le caracterizó toda su vida le sirvió no sólo para ahondar en las virtudes, sino también para dejar a la posteridad un elenco de obras respetables que le constituyen en uno de los varones más cultos del siglo XVII.
Obras de ∼: Comentarium in universam Aristotelis metaphisicam, Burgos y Salamanca, 1617, Salamanca, 1631; Opúscula tripartita, hoc est in tres controversias triplicis theologia divisa. In quarum primae variae disputationes de pura scholastica, ien secunda de morali, et in tertia de exposititiva theologia utiliter expenduntur, Donat, 1633; Comentarios a la Suma Teológica del Doctor Angélico, 7 vols.; Variae et selectae decisiones morales ad statyn ecclesiasticum a civilem pertinens, Lyon, 1664 y Colonia, 1755.
Bibl.: VV. AA., Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana, t. V, Barcelona, José Espasa e Hijos, 1909, pág. 1236; J. Cuervo (ed.), Historiadores del convento de San Esteban de Salamanca, t. I, Salamanca, 1914, pág. 588; A. Pardo Villar, "Dominicos orensanos ilustres. El Ilmo. Fray Francisco Araujo", en el Boletín de la Comisión de Monumentos de Orense, t. X, 219 (1933-1935), págs. 283-294 y 434-446; A. Couceiro Freijomil, Diccionario Bio-Biográfico de Escritores, vol. I, Santiago de Compostela, Bibliófilos Gallegos, 1951, págs. 77-78; R. Otero Pedrayo (dir.), Gran Enciclopedia Gallega, vol. III, Lugo, Silverio Cañada, 2003, págs. 129-130.
Algunos yerros académicos: (1) No nació Francisco de Araujo en 1590. (2) No es Comentarium sino Commentariorum. (3) No es ien secunda sino in secunda. (4) No es Donat sino Douai. (5) No es ad statyn ecclesiasticum sino ad statum ecclesiasticum. (6) La edición de 1755 no lo fue en Colonia sino en Ginebra. (7) La bibliografía que se ofrece es antigua, incompleta y parcial.
2014 «Araújo, Francisco de. Ordre religieux: O.P. Lieux d'activité: Salamanque. ¶ Notice biographique: (Verín/Orense 1580 - Madrid 1664). Entré dans l'ordre de Saint Dominique à Salamanque, il étudia et la théologie au couvent de San Esteban. Reçu docteur theologiae de l'Université de Salamanque en 1617. La même année, il obtient la chaire de prime dans la faculté de théologie, en substitution de Pedro de Herrera. Il y restera jusqu'en 1643 (ou 1649?), date à laquelle il fut nommé archevêque de Ségovie. Son commentaire à la Métaphysique fait de lui d'un des dominicains les plus originaux de son temps, dans le cadre d'un mouvement “néo-thomiste” opposé principalement aux interprétations promues par les Jésuites. Son opposant doctrinal principal fut le jésuite salamantin Pedro Hurtado de Mendoza. En théologie, il fut l'un des rares dominicains à s'opposer à la nécessité de la prédétermination physique, au profit d'une “prédétermination morale” selon lui plus conforme à la liberté (cf. II, q. 111, a. 5). ¶ Bibliographie: C. O'Brien, “La enigma de Francisco de Araujo”, La ciencia tomista 89 (1962), 221-234; & Mauricio Beuchot, “La doctrina tomista clásica del signo: Domingo de Soto, Francisco de Araujo y Juan de Santo Tomás”, Critica 36 (1980); & Norman J. Wells, “Francisco Araujo, O.P., on Eternal Truths”, in Graceful Reason. Essays in Ancient and Medieval Thought presented to Joseph Owens C.SS.R., ed. Lloyd P. Gerson (Toronto, 1983), 401-417; & Mauricio Beuchot, Metafísica: La ontología aristotelica-tomista de Francisco de Araujo (Mexico, 1987). ¶ Manuscrits: Materia de fide divina (Universidad de Salamanca, s. XVII in.), Madrid BNE, Ms. 470-II, f. 101-203. ¶ Oeuvres imprimées: • Araujo, Francisco de, Commentaria in universam Aristotelis metaphysicam tomus primus, quinque libros complectens, Burgos & Salamanca, Juan Bautista Varesio & Antonia Ramirez, 1617 [Burgos BP ; Caceres BP ; El Escorial BMon ; Lyon BM ; Madrid BUC, googlebooks ; Orihuela BP ; Palencia BP ; San Millan BMon; Toledo BP] • Commentaria in universam Aristotelis metaphysicam tomus primus, septem libros complectens a sexto usque ad duodecium inclusive, Salamanca, Antonia Ramirez, 1631 [Burgos BP; Caceres BP; Ciudad Real BP; El Escorial BMon; Lyon BM; Madrid BNE, BUC; Palencia BP; Toledo BP]. • Opuscula Tripartita : hoc est in tres controversias triplicis Theologiae divisa, in quarum prima variae disputationes De pure Scholastica, in secunda De morali et intertia De expositiva theologia ; utiliter expenduntur, Douai, Bartholomé Bardou, 1633 [Lyon BM; Madrid BNE]. • De fide, spe et charitate in secundam secundae Angelici doctoris commentarius, Salamanca, ed. Convento de San Esteban, 1635 [A Coruña ARG; Burgos BP; Madrid BNE; Toledo BP]. • In tertiam partem D. Thomae commentarii : tomus primus, Salamanca, ed. Convento de San Esteban, 1636. • In tertiam partem diui Thomae commentarii: tomus secundus, Salamanca, ed. Convento de San Esteban, 1636. • In primam secundae diui Thomae lecturarum, tomus primus, Salamanca, Diego Garcia / Convento de San Esteban, 1638. • In primam Secundae commentariorum tomus secundus, Madrid, Melchor Sanchez, 1646 [Albacete BP; Burgos BP; El Escorial BMon; Madrid BNE, BUC; Logroño BP; Palencia BP; Palma BP; Santiago OFM; Toledo BP]. • In primam partem D. Th. Commentariorum ... tomus primus, Madrid, Melchor Sanchez, 1647 [Burgos BP; El Escorial BMon; Logroño BP; Madrid BUC, BNE; Palencia BP; Palma BP; Toledo BP]. • Commentariorum in primam partem Diu. Thomae tomus secundus, Madrid, Melchor Sanchez, 1647 [Burgos BP; El Escorial BMon; Madrid BNE, BUC, BSem; Palencia BP; Palma BP; Toledo BP]. • Variae et selectae decisiones morales: ad statum ecclesiasticum & ciuilem pertinentes: opus bipartitum suis summariis & indicibus necessariis exornatum, Lyon, Philippe Borde, Laurent Arnaud, Pierre Borde & Guillaume Barbier, 1664 [Lyon BM] ; Cologne, apud Fratres de Tournes, 1745 [Alcala AHPTSI; Burgos BP; Granada FTSI; La Laguna BU; Malaga BP; Mahon BP; Orihuela BP; Palma BP].» (Jacob Schmutz [1971], Scholasticon, París 2008- [versión 9 septiembre 2014]: https://goo.gl/LW7HPg)
2016 «Araujo (Arvasius) František, tomistický filosof a teolog. Narodil se ve Verín v Galícii kolem roku 1580. 1601 složil řeholní sliby. V letech 1616-1617 vyučoval teologii v klášteře sv. Pavla v Burgosu, 1617-1621 vyučoval teologii jako zástupce Petra de Herrera v Salamance a v letech 1623-1647 vyučoval v katedrální škole (magister cathedraticus). 1648 byl jmenován biskupem v Segovii. Požíval velké vážnosti u krále Filipa IV. 1656 resignoval a žil pak v klášteře v Madridu. Zemřel 19. března 1664 v Madridu. Vynikal zbožností i hloubkou nauky. Napsal: Commentaria in Metaphysicam Aristotelis (2 díly, Salamanca 1617); Commentaria in Summam Theologicam (Salamanca 1635-1647), v druhém dílu polemizuje s molinisty o předurčení a milosti; Variae et selectae decisiones morales (Lyon 1664); Opuscula tripartita, h.e. in tres controversias triplicis theologiae divisa (Douai 1633). Byl rovněž dobrým hudebníkem, zvláště ovládal hru na varhany. Napsal teoreticko praktické dílo Libro de tientos y discursos de musica practica, y theorica de organo, intitulado facultad organica.» (Česká dominikánská provincie: Svatí a osobnosti řádu - http://www.op.cz/)
Algunas menciones a Francisco de Araujo
1854 «El hombre más grande, el teólogo mas excelso, el más hermoso adorno de la Academia de Coimbra fue sin duda Francisco Suárez, que por sus altos conocimientos, mereció de la silla apostólica el dictado de eximio doctor. A Salamanca debe Suárez las primeras nociones de teología que fecundaron el fértil campo de su espíritu. Suárez trae a la memoria al sabio Pedro de Herrera, que por sus relevantes prendas fue condecorado con las mitras de Canarias, Orense, Tuy y Tarazona. Llevó por oposición la cátedra de prima de la universidad, y después tuvo la de prima, que fundó Felipe III para la orden de predicadores. Se dice que se atrevía de repente a leer 5 horas sobre materias escolásticas; y sin libro alguno, glosar toda la Sagrada Escritura. Sus manuscritos, que nunca se han impreso, los tenía el eximio Doctor por un tesoro. […] ¡Qué honor para Herrera y para la Universidad, de quien era hijo! ¿Qué diremos de su sucesor Francisco de Araujo? Sus escritos, sus resoluciones morales, canónicas y civiles, no dejan razón de dudar de que fue hombre lleno de virtud, ciencia y erudición. A pesar suyo se le elevó al obispado de Segovia; le gobernó con sabiduría y prudencia por 8 años, y en este tiempo aconteció una cosa muy singular; pues estando enfermo de mucho peligro, vuelto a un crucifijo le dijo: Señor, por lo que os he servido os suplico humildemente, que no queráis que muera Obispo. Cumplióse su deseo, pues dándole Dios salud renunció, y vino a morir a su convento, cuyo cuerpo permanece incorrupto en el coro, cuya sillería costeó. Su parecer era de tanto peso para con la Majestad de Felipe IV, que se atestigua que algunas se le oyó decir al rey, que si todos los eruditos y teólogos preguntados por él sobre algún punto, sintiesen una misma cosa y se la aconsejasen, si solo Araujo consultase y pronunciase lo contrario, desechadas y no haciendo caso de las sentencias de los demás, seguiría y abrazaría el consejo de solo Araujo.» (P. M. Fr. Pascual Sánchez OP, “Memoria sobre la Universidad de Salamanca”, Album Salmantino, nº 27, domingo 28 de mayo de 1854, pág. 259.)
1955 «Los análogos atributivos son sistemas de varios conceptos. La analogía de los conceptos es doble: la de atributación y la de proporción metafórica (por ejemplo, la que media entre el hombre pintado y el real). Véase Araujo, In universam Aristotelis Methaphysicam, t. I, lib. III, q. I, art. 22.» (Gustavo Bueno, «Las estructuras “metafinitas”», Revista de Filosofía, Instituto Luis Vives, Madrid 1955, nº 53-54, pág. 243, nota 21.)
1956 «–¿Cuáles son para usted los últimos eslabones de la tradición filosófica española? –Yo los veo en dos grandes figuras desigualmente desconocidas. Juan de Santo Tomás y Francisco Araujo, un dominico de la escolástica tardía de nuestro siglo de oro. Es una lástima que no haya encontrado aún a su Maritain que lo divulgue.» (“La figura intelectual de Antonio Millán Puelles”, Punta Europa, Madrid, enero 1956, nº 1, págs. 135-144.)
1967 «Aún podemos añadir, a la nómina del siglo XVII, a tres filósofos dominicos: Melchor Coronado, autor de un Tractatus de existentia creata (Amberes 1624); Francisco de Araújo, que escribe Commentaria in universam Aristotelis metaphysicam (Salamanca, 1617-31), una réplica a Suárez de gran valor metafísico. En él se inspira el portugués Juan de Santo Tomás. Y, por último, Juan Martínez de Prado, autor de Controversiae metaphysicae (Alcalá 1669), que es una réplica a Juan de Santo Tomás, al que considera poco documentado. Martínez de Prado tiene razón en esto, pero es mucho menos profundo que el portugués.» (José María Benavente Barreda, “Ontología”, Enciclopedia de la Cultura Española, Editora Nacional, Madrid 1967, tomo 4, páginas 580-581.)
1992 «En Salamanca, en la Biblioteca de la Universidad, pues me encuentro a todo el siglo XVI: los Salmaticenses, los Complutenses... era igual que cuando ves un órgano y lo tocas a ver cómo suena, pues igual yo decía: a ver cómo suenan estos libros. Y resulta que te aficionas, y llegué a ser bastante experto en Tomismo, era un hobbie. Y allí me influyó mucho un tal Araujo, fíjense, y Juan de Santo Tomás... pero claro, ¡cómo voy a decir yo esto ahora! (Risas). Pero es la pura verdad. Araujo era el autor de unos «Comentarios a la Metafísica de Aristóteles», algo tremendo; debió ser un profesor del XVII, de Salamanca; y Juan de Santo Tomás fue un dominico, confesor de Felipe IV. Pues estos me gustaban. Claro, uno tenía sus preferencias. Por ejemplo, a Santo Tomás cada vez lo admiro más; Santo Tomás me influyó mucho más que San Agustín, porque entonces había libertad de pensamiento, como también había libertad de prensa, en época de Franco: podías comprar el ABC o el Ya, ¿verdad?, pues también había libertad de pensamiento: podías ser agustiniano o tomista, podías elegir, y yo elegí a Santo Tomás.» (“Entrevista académica a Gustavo Bueno”, Epilespia, Gijón, junio 1992, nº 7.)
Otra bibliografía sobre Francisco de Araujo
1914 Justo Cuervo Arango OP (1859-1921), Historiadores del Convento de San Esteban de Salamanca, Imprenta Católica Salmanticense, Salamanca 1914-1915, 3 vols. I:581-592. II:863-877. III:611-612.
1918 Benito Fernández Alonso (1848-1922), “Heráldica. Los Araujo”, Boletín de la Comisión Provincial de Monumentos Históricos y Artísticos de Orense, Orense, enero-febrero 1918, volúmen V, nº 118, págs. 385-390.
1919 Manuel Martínez Sueiro (1873-1920), “Ilustres dominicos gallegos en San Esteban de Salamanca”, Boletín de la Comisión Provincial de Monumentos Históricos y Artísticos de Orense, Orense, noviembre-diciembre 1919, volúmen VI, nº 129, págs. 323-334, y nº 130 y nº 131 (1920).
1935 Aureliano Pardo Villar OP (1882-1957), «El ilmo. fr. Francisco de Araujo (Notas adicionales a su biografía)», Boletín de la Comisión de Monumentos de Orense, X (1935), 283-294 y 434-436.
1945 Juan Rodríguez Cabrero CM (1880-1949), Fr. Francisco Fidalgo de Araujo (discurso inédito de ingreso en la Real Academia Gallega, conservado manuscrito en la biblioteca de esa Academia en La Coruña, apud Francisco Elías de Tejada 1966, pág. 207).
1946 Jesús Taboada, Varones ilustres de la comarca verinense, Bolaños y Aguilar, Madrid 1946, págs. 44-54.
1961 Thomas Chrysostom O'Brien OP, Francisco Araújo, OP (1580-1664) on the efficacy of actual grace: his rejection of physical premotion, Ph. D. Pontificio Studiorum Universitas a Sancto Thoma Aquinate in Urbe 1961, 2 volúmenes.
1962 Thomas Chrysostom O'Brien OP, El enigma de Francisco de Araujo, Pontificium Athenaeum Internationale 'Angelicum' (Dissertatio ad Lauream in Facultate S. Theologiae apud Pontificium Athenaeum 'Angelicum' de Urbe), Salamanca 1962, viii+123 págs.
Thomas Chrysostom O'Brien OP, «El enigma de Francisco de Araujo», La Ciencia Tomista, 1962, 89:221-234; 1963, 90:3-79.
1965 Ramón Hernández Martín OP, «Actividad universitaria de Francisco de Araujo en los claustros salmantinos», La Ciencia Tomista, 1965, 92:203-271.
1966 Francisco Elías de Tejada & Gabriela Pércopo, El reino de Galicia hasta 1700, Editorial Galaxia, Vigo 1966, tomo I, págs. 207-211.
1972 José Luis Fernández Rodríguez, El ente de razón en Francisco de Araújo, EUNSA, Pamplona 1972, 175 págs.
1978 Mauricio Beuchot OP (1950), “Estructura y función de la metafísica según Francisco de Araújo”, Libro Anual del ISEE, México 1978, vol. 7, págs. 287-322.
1980 Mauricio Beuchot OP, “La doctrina tomista clásica sobre el signo: Domingo de Soto, Francisco de Araújo y Juan de Santo Tomás”, Crítica. Revista Hispanoamericana de Filosofía, Diciembre 1980, vol. 12, nº 36, págs. 39-60.
1983 Norman J. Wells (1931-2013), “Francisco Araujo, OP, on the Eternal Truths”, en Lloyd P. Gerson (ed.), Graceful Reason. Essays in Ancient and Medieval Philosophy presented to Joseph Owens, CSSR, on the occasion of his Seventy-fifth birthday..., Pontifical Institute of Mediaeval Studies, Toronto 1983, págs. 401-417.
1987 Mauricio Beuchot OP, Metafísica. La ontología aristotélico-tomista de Francisco de Araújo, Universidad Nacional Autónoma de México, México 1987, 364 págs.
Ulrich Horst OP (1931), Die Diskussion um die Immaculata Conceptio im Dominikanerorden, Ferdinand Schöningh, Paderborn 1987, págs. 49-58: “4. Pedro de Herrera und Francisco de Araujo”.
2003 Ulrich Horst OP, Die Lehrautorität des Papstes und die dominikaner-theologen der Schule von Salamanca, Akademie Verlag, Berlin 2003, págs. 165-168: “2. Francisco de Araújo (1580-1664)”.
2009 Ulrich Horst OP, Dogma und Theologie. Dominikanertheologen in den Kontroversen um die Immaculata Conceptio, Akademie Verlag, Berlin 2009, págs. 136-138: “3. Franciscus de Araújo”.
Ulrich Horst OP, “Probleme der universitären und kirchlichen Lehrautorität nach dem Dominikaner Francisco de Araújo (1580-1664)”, Annuarium Historiae Conciliorum, Roma 2009, 41 Jahrgang, Heft 1, págs. 69-94.
2013 Daniel D. Novotný, “Twenty years after Suárez: Francisco de Araújo on the Nature, Existence, and Causes of Entia Rationis”, en Victor M. Salas (ed.), Hircocervi and Other Metaphysical Wonders. Essays in Honor of John P. Doyle, Marquette University Press, Milwaukee 2013, págs. 241-268.
Bibliografía de Francisco de Araujo
1617 Commentariorum in universam Aristotelis metaphysicam, tomus primus, quinque libros complectens, autore Fr. Francisco Araujo dominicano, Verinensi, Salmanticae Magistro & Primaria Theologorum Cathedrae ordinario Moderatore, Ex officinis Typographicis Ioannis Baptistae Varesii & Antoniae Ramirez viduae, Burgis et Salmanticae 1617, 16+850. → https://goo.gl/6Apqil
1631 Commentariorum in universam Aristotelis metaphisicam, tomus secundus, septem libros complectens a sexto, usque ad duodecimum inclusive, authore magistro fratre Francisco de Araujo dominicano, sacrae theologiae Salmanticae primario professore, Apud Antoniam Ramirez, Salmanticae 1631, 8+685+13 páginas. → https://goo.gl/e9FcX9
1633 Opuscula Tripartita hoc est in tres controversias triplicis theologiae divisa, in quarum prima variae disputationes de pure scholastica, in secunda De Morali et in tertia De Expositiva Theologia, utiliter expenduntur. Autore R. Admodum ac eximio P. F. Francisco Ab Araujo ordinis praedicatorum sacrae theologiae magistro, Ex Officina Bartholomaei Bardou, Duaci MDCXXXIII [Douai 1633], 16+664+5 páginas. → https://goo.gl/Kdga1e
1635 De fide, spe et charitate in secundam secundae Angelici doctoris commentarius, Salmanticae Apud Sanctum Stephanum Ordinis Praedicatorum, Anno MDCXXXV [Salamanca 1635], 12+705+50 págs. → https://goo.gl/7joOWi
1636 In tertiam partem Divi Thomae Commentarii. Tomus primus, Salmanticae Apud Sanctum Stephanum Ordinis Praedicatorum, Anno MDCXXXVI [Salamanca 1636], 14+763+19 págs. → https://goo.gl/c5HHJL
1636 In tertiam partem Divi Thomae Commentarii. Tomus secundus, Salmanticae Apud Sanctum Stephanum Ordinis Praedicatorum, Anno MDCXXXVI [Salamanca 1636], 7+807+9 págs. → https://goo.gl/Q31er3
1638 In primam secundae Divi Thomae lecturarum, tomus primus, Didacus García, Apud Sanctum Stephanum Ordinis Praedicatorum, Salamanca 1638, 16+758+42 págs. → https://goo.gl/DkZOBI
1646 In primam secundae commentariorum tomus secundus, Melchor Sánchez, Madrid 1646, 12+730+14 págs. → https://goo.gl/3NGydw
1647 Fratris Francisci de Arauxo ordinis praedicatorum magistri, et primarii salmantini Commentariorum in primam partem Div. Thomae. Commentariorum. Tomus primus., Ex Officina Melchoris Sanchez Typographi, Matriti 1647, 8+775 páginas in-folio. → https://goo.gl/s9v5pD
Fratis Francisci de Arauxo dominicani in sacra theolocia magistri, et primarii salmantini Commentariorum in primam partem Div. Thomae. Tomus secundus, Ex Officina Melchioris Sanchez Typographi, Matriti 1647, 4+770+14 páginas in-folio. → https://goo.gl/wPb93d
1664 Illustrissimi et Reverendissimi D. D. Francisci de Arauxo, Ord. Praedicatorum, Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum & ciuilem pertinentes. Opus bipartitum suis summariis & indicibus necessariis exornatum. Nunc primum in lucem prodit, Sumptib. Philippi Borde, Laurentii Arnaud, Petri Borde, et Guill. Barbier, Lugduni [León de Francia] 1664, 16+618+28 páginas in-folio. → https://goo.gl/lvrXUg
1745 Illustrissimi et Reverendissimi D. D. Francisci de Arauxo, Ord. Praedicatorum, Variae et selectae decisiones morales ad statum ecclesiasticum & civilem pertinentes. Opus bipartitum suis summariis & indicibus necessariis exornatum. Editio nova, accurata et emendata, Apud Fratres de Tournes, Coloniae Allobrogum [Ginebra] 1745, 14+618+28 páginas in-folio. → https://goo.gl/JeetqZ