Juan II
Papa (2, I, 533-8, V, 535), cuyo nombre hasta subir al solio pontificio era el pagano de Mercurio. Era sacerdote de San Clemente y fue el primero en cambiar su nombre, como queda indicado. Elegido tras de maquinaciones indignas y simoníacas, contra su elección se pronunció enérgicamente el último decreto del Senado romano. Juan aprobó el decreto acerca de la fe dado por el emperador Justiniano I, valiéndose de los obispos Hipacio y Demetrio y que puso fin, mediante una decisión, en el 534, a la cuestión teofástica; asimismo, Juan recargó por su cuenta la sentencia que el Sínodo de Marsella había emitido contra el obispo contumelioso de Reji (Riez).