Punto segundo · De la comunicación con los infieles
La comunicación de los fieles con los infieles puede ser de las tres maneras siguientes, es a saber; formal, sagrada, y civil. Formal será, si se comunica con ellos en los mismos ejercicios de su infidelidad. Sagrada, cuando es la comunicación en los actos de nuestra religión: y civil, cuando lo es en asuntos seculares y civiles. La primera se prohibe a los fieles por derecho natural y divino, como ya dijimos. La segunda lo está por la Iglesia en cuanto a los sacramentos, y sacrificios; y así es nulo el matrimonio del fiel con el infiel. Al sacrificio de la Misa sólo puede asistir el infiel no excomulgado, habiendo esperanza de su reducción. También pueden ser admitidos a la Misa de los catecúmenos, esto es, hasta el ofertorio; como asimismo a los sermones, y oraciones privadas. La tercera comunicación, aunque no esté prohibida por derecho natural ni divino, la ha prohibido la Iglesia para algunos [186] casos respecto de los judíos. Véase el Comp. Latino punt. 3.
P. ¿Es lícito a los fieles vender a los infieles las cosas de que han de abusar para sus falsos sacrilegios, y ritos? R. Que o las tales cosas están por su naturaleza determinadas para este fin, o son indiferentes para él, o para otro. Si lo primero, es ilícita su venta; y así lo será fabricarles ídolos, edificarles mezquitas, &c. Si lo segundo, será lícita la venta. Véase Sto. Tom. 2. 2. q. 169. art. 2. ad 4.
[ Compendio moral salmaticense · Pamplona 1805, tomo 1, páginas 185-186 ]