Filosofía en español 
Filosofía en español


Discurso en San Fernando (Cádiz)


12 de noviembre de 1933a
Sancho Dávila, Julián Pemartín,
Hacia la historia de la Falange. Primera contribución de Sevilla.
Jerez de la Frontera : Jerez Industrial, 1938, p. 43

 
[ 172 ]
 

En sus comienzos, en el instante en que Carranza y José Antonio aparecían en el escenario, unos pistoleros descargaron sus armas dentro del local y causaron cinco bajas: un muerto y cuatro heridosb. A los pocos momentos, y como medida salvadora, el delegado de la autoridad suspendió el acto. José Antonio, entonces, comenzó un discurso diciendo que nunca cumpliría las órdenes de una autoridad que no la poseía para impedir la libre circulación de los asesinos, y siguió en duros términos de censurac.

Transcurrido un rato Carranza le pidió que terminase y entonces José Antonio acabó con estas palabras: «La respetable, y aquí única, autoridad de don Ramón Carranza me ruega que termine: sólo ahora se da por terminado el acto.»d


⎯⎯⎯

a  Mitin organizado por Acción Ciudadana en el Teatro de las Cortes.

b  El fallecido será Enrique de Segismundo García Matilla. Entre los heridos estaba Mercedes Larios y Fernández de Villavicencio, hermana de la futura esposa de Miguel Primo de Rivera y Sáenz de Heredia, que como consecuencia de las heridas perdió la vista para siempre. Según nota publicada en ABC (Madrid), 19 de noviembre de 1933, el pleno del Ayuntamiento de San Fernando se manifestó en contra del atentado: «El acuerdo fue tomado por los radicales y socialistas.»

c  Pese a señalar como fuente la obra de Dávila y Pemartín, el anterior recopilador ilustró el fragmento con unas palabras de Ramón de Carranza ante la prohibición del delegado gubernativo: «No se puede suspender así este acto. Yo no hablaré. Pero tenéis que escuchar a José Antonio Primo de Rivera, digno hijo de su padre.» Igualmente, puso en boca de José Antonio una literalidad que no aparece en la fuente de la que dice haberla tomado: «Como veis, estos hechos que se suceden frecuentemente no pueden repetirse. Hay que terminar con este estado alarmante de desorden y anarquía. La autoridad, cobarde para evitar la introducción de elementos extraños, no lo es, en cambio, para suspender este acto, atropellando nuestros derechos.» Quizá esto provenga de otra fuente no declarada.

d  Según el anterior recopilador, José Antonio concluyó diciendo: «Antes quiero que todos gritéis conmigo: ¡Viva España!»