Filosofía en español 
Filosofía en español

cubierta

 
Dr. Ramón Insúa Rodríguez
Catedrático de la Universidad de Guayaquil

Historia de la Filosofía en Hispanoamérica

segunda edición
 
Universidad de Guayaquil
Departamento de Publicaciones
ecuador s. a.
Imprenta de la Universidad
GUAYAQUIL 1949

escudo

 
Universidad de Guayaquil ❦ Rector de la Universidad: Dr. José Miguel García Moreno.
Departamento de Publicaciones ❦ P. O. Box 471, Guayaquil, Ecuador S. A.
Director del Departamento: Prof. Rafael Euclides Silva,
Catedrático de la Facultad de Filosofía y Letras.
Ciencias Histórico-Sociales, nº 3, segunda edición.


Índice

Prólogo, 7

Capítulo I. Escuelas Filosóficas en Hispanoamérica durante la época colonial.– Las ideas filosóficas de Cristóbal Colón.– Problemas morales planteados por la Conquista Española.– El problema de la esclavitud.– El Padre Montesinos.– Nacimiento del Derecho Internacional y de la Filosofía del Derecho.– Francisco de Vitoria.– Fray Bartolomé de las Casas.– Ginés de Sepúlveda.– P. Vicente Valverde.– Dr. Bartolomé Frías de Albornoz.– Características de la Colonización española, 11

Capítulo II. La Filosofía escolástica en el Nuevo Mundo.– Fray Alonso de Veracruz.– Los discípulos de Francisco de Vitoria en América: Fray Pedro de Pravia, Fray Julián Garcés, Fray Domingo de Mendoza.– Discípulos del Colegio de San Esteban de Salamanca que residieron en América.– Fray Vicente Valverde, Fray Juan Solano, Fray Juan Salmerón.– La escuela escotista en América: Fray Alfonso Briceño.– El suarismo en América: Antonio Rubio.– El erasmismo en América: Fray Juan de Zumárraga.– Un discípulo de Tomás Moro en Méjico: Vasco de Quiroga.– El criticismo de Vives en el Nuevo Mundo: Cervantes de Salazar.– Controversia sobre las ventajas y desventajas de los estudios clásicos.– Sánchez de Muñón.– Tirso de Molina en América.– La astrología judiciaria: El Capitán Melchor Xifré del Águila.– Escritores místicos: Lorenzo de Cepeda.– La doctrina platónica.– Discurso en loor de la poesía.– El Inca Garcilaso de la Vega, 59

Capítulo III. La Inquisición en América.– El protestantismo en Hispanoamérica durante la Colonia: Juan Aventrot.– El judaísmo en Hispanoamérica durante la Colonia: Antonio José de Silva, Daniel Israel López Laguna.– Alumbrados, 93

Capítulo IV. Las doctrinas regalistas en España y su influjo en América.– La expulsión de los jesuitas.– Varones eminentes que se contaban entre los jesuitas expulsados.– El Abate Hermoso.– Jasé Basilio de Gama.– Filósofos jesuitas americanos: Padre Diego José Abad.– Padre Francisco Javier Alegre.– Padre Agustín de Castro.– Padre Rafael Landívar.– Padre Pedro Márquez.– Padre Manuel Menéndez.– Padre Juan Bautista Aguirre.– Padre Lacunza.– Filósofos jesuitas 'españoles que residieron, en Hispanoamérica: Padre Joaquín Millas.– Padre Juan Manuel Peramás, 107

Capítulo V. Polígrafos hispanoamericanos.– Carlos de Sigüenza y Góngora.– Sor Juana Inés de la Cruz.– Dr. Juan de Espinoza Medrano.– Dr. Pedro Peralta Barnuevo.– José Eusebio de Llano Zapata, 151

Capítulo VI. Influencia del enciclopedismo francés en el pensamiento hispanoamericano.– El buen salvaje.– Fray Benito Jerónimo Feijoo y su influjo en América.– Don Pablo de Olavide.– Ideas dominantes en Hispanoamérica durante los últimos años de la monarquía castellana, 173

Capítulo VII. Nuevas doctrinas filosóficas en Hispanoamérica.– Antonio de Alzate.– Benito Díaz de Gamarra.– Félix de Azara.– José Celestino Mutis.– Francisco José de Caldas.– Alejandro Humboldt.– La actividad intelectual en los años que precedieron a la Independencia.– Dr. Francisco Eugenio de Santa Cruz y Espejo.– Las ideas fisiócratas en Hispanoamérica.– Hipólito Vieytes.– Dr. Gregorio Funes.– Las Cortes de Cádiz.– José Mejía.– Influencia de los periódicos españoles en Hispanoamérica.– Escritores españoles que influyeron en América durante la Guerra de la Independencia y la Constitución de las nuevas nacionalidades: Juan Antonio Llorente.– Antonio Puigblanch.– Joaquín Lorenzo de Villanueva.– El Arzobispo Amat.– Canga Arguellas.– Pedro Inguanzo.– José Antonio Ortiz Urruela.– La Revolución portuguesa de veinte y cuatro de Agosto de mil ochocientos veinte.– Las ideas filosóficas de José Blanco White y su influencia en el Nuevo Mundo.– Bentham.– De Pradt.– Bolívar, 189

Capítulo VIII. Estado social de Hispanoamérica en los primeros años de vida independiente.– La Filosofía en Hispanoamérica después de la Independencia.– José Joaquín de Olmedo.– Vicente Rocafuerte.– Fray Camilo Henríquez.– Francisco de Paula Vigil.– Crisóstomo Lafinur.– Dr. Manuel Fernández Agüero.– Diego Alcorta.– Alberdi.– Francisco Bilbao.– Propaganda Protestante en Hispanoamérica con posterioridad a la Independencia.– Pensadores católicos.– Dr. José Ignacio Moreno.– Fray Vicente Solano.– La Escuela Escocesa.– Andrés Bello.– Sarmiento.– Lastarria.– José Joaquín de Mora.– Empirismo sensualista.– José Miguel Varas.– Ventura Marín.– P. José Agustín Caballero.– Félix Valera.– José de la Luz Caballero.– Manuel González del Valle, 239

Capítulo IX. El eclecticismo en Hispanoamérica.– P. Francisco Mont Alverne.– Domingo Gonçalves de Magalhães.– Esteban Echeverría.– Influencia de la escuela krausista en Hispanoamérica.– Carlos Encina.– Alejandro Tapia.– Tristán Medina.– Mariano Cubí.– Carlos Darwin en América.– Filosofía Católica.– José Joaquín de Pesado.– José Bernardo Couto.– Clemente Mungía.– Ignacio Ramírez.– Influjo en la Literatura hispanoamericana de las ideas materialistas.– Ramón Zambrano.– Fray Jacinto Martínez.– Rafael María Baralt.– José Eusebio Caro.– José Joaquín Ortiz.– Manuel María Madiedo.– José Manuel Groot.– José V. Elizaguirre.– Juan Montalvo.– Gabriel García Moreno.– Eugenio María de Hostos.– El positivismo en América.– Gabino Barrera.– Agustín Aragón.– Justo Sierra.– Andrés Poey.– José Ingenieros.– Benjamín Constant Botelho de Magalhães.– Miguel Lemos.– Luis Pereira Barreto.– Tobías Barreto.– Sylvio Romero.– Farías Bribo.– Jackson de Figueiredo.– José Enrique Rodó.– González Prada.– Enrique José Varona.– Alejandro Korn, 289

[ Colofón, 340 ]

(Ramón Insúa Rodríguez, Historia de la Filosofía en Hispanoamérica, Guayaquil 1949, páginas 337-339.)

Prólogo

En Hispanoamérica, aun los historiadores más eminentes y eruditos, que recuerdan la más nimia y dudosa hazaña de guerreros y caudillos, con frecuencia de harto menguada talla, y se deleitan relatando lamentables hechos de armas y efímeras y ruines maniobras políticas, no consagran una sola página al estudio de la vida y las obras de los pensadores hispanoamericanos, que, grandes y pequeños, originales e imitadores, constituyen la expresión de la capacidad especulativa de una raza vigorosa en plena expansión y rápido progreso. Olvidan es imposible comprender y exponer el proceso histórico del desenvolvimiento de la vida y la cultura de los pueblos, sin el estudio de sus actividades filosóficas. Sólo el conocimiento profundo del desarrollo y transformación de las ideas, nos permite llegar a la comprensión de la realidad histórica.

No siempre es posible en Hispanoamérica estudiar las ideas de una época en tratados de carácter exclusivamente filosófico, de exposición rigurosa, de íntima y lógica trabazón entre todas sus partes. Frecuentemente, las más originales se encuentran en páginas de libros muy desemejantes, muchos de ellos verdaderas improvisaciones, y es preciso perseguirlas y descubrirlas en las obras literarias, en las manifestaciones científicas, artísticas, políticas y sociales.

En el ambiente intelectual de cada etapa histórica, en la esencia de toda obra literaria, en lo profundo de toda doctrina política, se encuentra siempre una doctrina filosófica, explícita o no, hija unas veces de la reflexión, otras de la intuición de pueblos o de individuos, ya fruto autóctono, ya mero injerto de doctrinas extranjeras.

Nunca Hispanoamérica se ha mostrado cerrada e impenetrable a las corrientes filosóficas extranjeras, siempre, con más o menos retraso, llegaron las doctrinas predominantes en Europa y la Historia de su Filosofía se ajusta a los ciclos históricos de la Filosofía universal. En ella tuvieron representantes de más o menos lucida talla, la escolástica tradicional, la escolástica renovada por los pensadores españoles del Renacimiento, el erasmismo, el criticismo vivista, el empirismo baconiano, el platonismo renacentista, la escuela mística española, el cartesianismo, el sensualismo, el enciclopedismo, el tradicionalismo, la escuela escocesa, el eclecticismo, los grandes sistemas metafísicos posteriores a la crítica kantiana, la restauración escolástica, el positivismo y la reacción idealista contemporánea.

No sólo mientras formó parte de la Monarquía española conservó Hispanoamérica su unidad intelectual. Hoy, fraccionada en numerosos Estados independientes, conserva incólume la conciencia colectiva y el recuerdo de la tradición y las glorias comunes. Nunca se produjo una solución de continuidad en el desarrollo de su cultura, evolucionando todos sus pueblos al mismo tiempo, bajo las mismas influencias externas y por la acción de idénticas fuerzas e impulsos internos y manifestando en todo momento identidad de ideas, gustos y aspiraciones, viviendo siempre en estrecha comunidad intelectual. Lo mismo antes que después de la Independencia, la evolución de las ideas filosóficas se realiza siguiendo un curso uniforme desde Méjico hasta la República Argentina.

Al escribir esta Historia resolvimos estudiar sólo los pensadores ya fallecidos. Ello nos ha vedado tratar de los contemporáneos que por fortuna viven y entre los que se cuentan algunos destinados a ocupar, de seguro, relevante lugar en las futuras Historias de la Filosofía hispanoamericana.

Enormes dificultades ofrece el intento de encerrar en el breve espacio de un libro, de corto número de páginas, un proceso tan complicado como el desarrollo continental del pensamiento hispanoamericano, con el agravante de ser la mayor parte de sus obras filosóficas verdaderas rarezas bibliográficas. Conocedores de lo arduo del empeño sólo nos propusimos al componer este bosquejo de Historia atraer hacia materia tan descuidada, la curiosidad de las gentes y la atención de los estudiosos. Por afortunados nos tendríamos si lo hubiéramos logrado.

En el momento actual, la Historia de la Filosofía hispanoamericana más que de vastas y aparatosas síntesis, de elocuentes disertaciones, forzosamente superficiales y vagas, precisa se le consagren monografías críticas, bien encaminadas investigaciones biográficas, minuciosas bibliografías, estudios largos, silenciosos y solitarios. Y no es que queramos –ello sería absurdo– reducir la labor del historiador de la Filosofía hispanoamericana a comprobar fechas, constatar hechos, amontonar libros, folletos y documentos. No, todo ello es sólo la materia prima, que el historiador habrá de ordenar con la disciplina de su mente, exponer con la claridad de su método, exornar con la belleza de su estilo. Que si bien puede llamarse erróneamente historiador al compilador incansable, al paciente bibliógrafo, al anotador erudito, no merece el nombre augusto de tal, sino quien sabe vivificar la materia inerte con el soplo inspirado del poeta, viendo y juzgando el curso majestuoso de los acontecimientos humanos desde aquella austera y luminosa región, reservada a los genios, donde se unen en estrecho y consustancial abrazo, Verdad y Belleza.

(Ramón Insúa Rodríguez, Historia de la Filosofía en Hispanoamérica, Guayaquil 1949, páginas 7-10.)

Acabose de imprimir este volumen en la imprenta de la
Universidad de Guayaquil, siendo regente el sr.
Rafael E. García; jefe de linotipos, el sr. F.
Ripalda L.; prensista, sr. Fausto Gómez
y ayudantes, srs. Jacinto Coronel,
Nicanor Vargas y Miguel
Maridueña.
16 de setiembre de 1949.